Vida Moderna
¿Cómo mejorar la calidad del sueño de manera natural?
Dormir ayuda al cuerpo y al cerebro a recuperarse del estrés cotidiano.
Dormir bien es esencial para la salud y el bienestar. Para la mayoría de personas es recomendable dormir al menos siete horas para mantenerse activos y renovados, ya que esta acción ayuda al cuerpo y al cerebro a recuperarse del estrés al que se someten de manera regular.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), “el 40% de la población mundial duerme mal y sufre algún tipo de trastorno del sueño”, por ello, una gran cantidad de personas llegan a sufrir de ansiedad, depresión, hipertensión e incluso tienen riesgo de padecer un infarto cerebral.
Recomendaciones para mejorar la calidad del sueño
Esta científicamente comprobado que la calidad del sueño puede mejorar si la persona cambia su estilo de vida y usa remedios naturales. Un ejemplo de ello es hacer ejercicio de forma regular; dormir en un ambiente tranquilo y emplear algunos suplementos naturales.
1. Realizar actividad física diariamente
Como se mencionó con anterioridad, está demostrado que el entrenamiento físico puede ayudar a mejorar la calidad del sueño. Esto se debe a que el ejercicio aeróbico, por ejemplo, aumenta el bienestar psicológico, protege el sistema inmunitario y permite un mejor descanso nocturno en aquellos sujetos que sufren de insomnio primario crónico.
Lo más leído
El ejercicio es la mejor alternativa no farmacológica para conciliar el sueño y cumplir con las ocho horas recomendadas para adultos. Además, ayuda a prevenir algunos de los síntomas comunes del insomnio, los cuales incluyen mal humor, cansancio, problemas de concentración, despertares nocturnos y una reducción significativa de la calidad de vida.
2. Dormir en un entorno limpio, silencioso y poco iluminado
Investigaciones dedicadas a indagar en la relación entre el entorno y la calidad del sueño han comprobado que los factores ambientales pueden jugar un papel crucial a la hora de ir a dormir. La falta de sueño puede verse afectada por variables como la edad, las condiciones sicológicas, fisiológicas y también por el entorno donde se duerme.
Es por ello que algunos expertos recomiendan mantener una habitación limpia y ordenada que incite al descanso, además de adecuarla para que este sea un lugar silencioso, con una luz suave y la temperatura ideal y que contenga materiales delicados que permitan la circulación del aire.
3. Tomar un buen suplemento para dormir
Con el ritmo de vida que llevan algunas personas en la actualidad, como trabajar por turnos o viajar frecuentemente hace que al llegar a casa no concilien el sueño fácilmente; por lo que duermen menos horas del tiempo establecido.
En otros casos, el más mínimo ruido puede perturbar la tranquilidad y hacer que las personas se despierten y pasen la noche en vela. Al afrontar dicho escenario, es recomendable recurrir a suplementos que ayuden a dormir de una forma eficaz y segura.
4. Utilizar la cama solo para dormir y evitar siestas largas
Para mejorar la calidad del sueño, se debe tener en cuenta que la cama es un lugar sagrado que permite a la persona descansar y llenarse de energía vital para realizar sus actividades cotidianas. Por tanto, la habitación personal debe respetarse y procurar utilizarla solo para dicha labor, evitando su adecuación como lugar de trabajo o espacio para comer.
Por otra parte, algunas personas no pueden dormir durante el día o tienen problemas para dormir en lugares que no sean sus propias camas, lo que a veces es necesario para dormir la siesta y aunque este ejercicio puede ser muy reconfortante, no debe superar los 20 o 30 minutos.
Lo anterior, teniendo en cuenta que muchas personas que practican esta actividad no logran conciliar el sueño en la noche y dormir mal en el horario establecido esta asociado con el deterioro prolongado del estado de salud.