Vida Moderna
Cómo preparar la cáscara de banano para regular el azúcar en la sangre y bajar el colesterol
La cáscara de banano es rica en fibra, por lo que puede tratar problemas de estreñimiento, y de esta manera evitar el tránsito intestinal lento y la acumulación de desechos en el colon.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un consumo de al menos cinco porciones de fruta al día, pues son ricas en antioxidantes y aportan vitaminas y minerales que el cuerpo necesita.
Sin embargo, es común que al consumir las frutas desechemos la cáscara sin conocer cuales son verdaderamente los beneficios de consumirlas. Algunas, como es el caso de la cáscara de banano, posee nutrientes como el potasio y trae otros importantes beneficios para la salud.
Según el portal Tua Saúde, la cáscara de banano retrasa la absorción de grasas y los azúcares que se ubican a nivel intestinal evitando el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas y el aumento de azúcar en la sangre. La cáscara se puede usar en “forma de harina, de té, agregarla a los batidos o utilizarla para preparar pasteles y otros postres”, asegura el portal de salud.
Otro de los beneficios que trae consumir cáscara de banano es prevenir el envejecimiento prematuro, pues la cáscara de banano posee compuestos bioactivos con propiedades antioxidantes, que previenen el surgimiento de arrugas e incluso previene algunos tipos de cáncer.
Naturalmente los componentes del banano ayudan con la pérdida de peso, a mejorar el estado de ánimo, a proteger el corazón, a controlar los nervios y a aliviar úlceras, según información del portal Mejor con Salud; sin embargo, la cáscara de banano también posee estas propiedades y con una buena preparación se pueden obtener muchos beneficios para la salud.
Como lo cuenta el portal Tua Saúde, consumir cáscara de banano ha demostrado que ayuda a proteger el cuerpo de la aparición de bacterias que causan la gingivitis y periodontitis, por lo que ayuda a proteger los dientes y mantener la salud oral.
Según estudios citados por el portal, la cáscara de banano es también rica en potasio, lo que evita la debilidad y fatiga muscular, por este motivo es recomendable su consumo a personas que realizan ejercicio físico, incluso puede ser preparado en batidos que se pueden consumir durante el ejercicio.
Tua Saúde también publicó una tabla de composición nutricional de 100 gramos de cáscara de plátano, donde se destacan ítems como la energía con 35,3 kilocalorías por porción, 4,91 gramos de carbohidratos, 0.99 gramos de grasa, 1,69 gramos de proteína y 1,99 gramos de fibra.
Otro método en el que se puede preparar la cáscara de banano es por medio de la infusión, que también aporta beneficios ricos en calcio y potasio. La infusión de esta cáscara contiene altos niveles de triptófano, un aminoácido que produce las hormonas que inducen el sueño y que son específicamente la serotonina y la melatonina.
El consumo de la cáscara en infusión es recomendado para contrarrestar la retención de líquidos, la hipertensión y las contracciones musculares que genera el consumo elevado de sodio, mineral contenido en la sal. El potasio equilibra el líquido del cuerpo y ayuda a los riñones a eliminar el exceso de sodio.
De hecho la combinación de magnesio y manganeso que las personas pueden obtener al consumir esta infusión resulta de gran ayuda para los huesos, debido a que estos minerales contribuyen a aumentar la densidad ósea, así como a prevenir la osteoporosis, enfermedad que con frecuencia se genera como producto del envejecimiento.
Otra de las recomendaciones del portal de salud Tua Saúde es preparar la cáscara de banano en forma de batido con los siguientes ingredientes: una cucharada de matcha en polvo, un banano congelado en rodajas, la cáscara del banano, una cucharadita de semillas de chía y una taza de leche de almendra o coco. Al poner todos los ingredientes en la máquina, se deben licuar y agregar una cucharada de semillas de chía antes de su ingesta.
La segunda recomendación es licuar un banano, una taza de arándanos o frambuesas, una cucharada de jengibre rallado, una cucharada de miel y ½ taza de agua tibia, y si no le gusta esta preparación, otra sugerencia es licuar un plátano, 200 g de espinacas frescas, ½ taza de yogur bajo en grasa, 1/3 de taza de cereal triturado y una cucharada de miel.