¿Cómo preparar salvado de avena para reducir el azúcar en la sangre?

Antes de explicar qué es el salvado de avena, es importante recordar las increíbles propiedades de este cereal, que pertenece a la familia de las gramíneas, y los beneficios que aporta al organismo cuando es parte de una dieta balanceada.

De acuerdo con el portal Quaker LATAM, al ser de grano entero, la avena mantiene su composición nutricional original al conservar el endospermo, que es su fuente principal de energía y que contiene carbohidratos y proteína.

También está el salvado, que contiene fibra insoluble y soluble, así como vitaminas del complejo B y minerales. Por último, está el germen, con grasas insaturadas, vitaminas del complejo B y otros nutrientes que ayudan a mantener un sistema inmunitario fuerte.

Así que si la avena aporta grandes beneficios al organismo, el salvado podría ser más efectivo para fortalecer las defensas y mantener una alimentación completa, potente y deliciosa.

¿Qué es el salvado de avena?

Este alimento se destaca por su aporte de carbohidratos complejos de lenta absorción, grasas cardiosaludables, fibra, proteína vegetal y minerales como potasio, magnesio, calcio y fósforo, así como vitaminas del grupo B.

Se obtiene al retirar la cáscara exterior del grano de avena, que no es comestible, pero que en su interior guarda una pielecilla con la que está recubierto el grano que, al separarla, se utiliza como suplemento nutricional.

Aunque el salvado de avena es uno de los productos de este cereal más fáciles de encontrar en un supermercado, también se puede encontrar en el grano natural fácilmente.

Este producto se puede añadir a zumos, batidos, sopas, yogures e incluso a ensaladas, ya que se usa como una potente fuente de fibra. De hecho, la avena integral conserva el salvado, bien sea en grano o en copos, pero en las versiones no integrales de este cereal el salvado se retira al quitar la cáscara del grano para lograr una textura refinada.

Beneficios de consumir salvado de avena

Este alimento también aporta una buena cantidad de antioxidantes y micronutrientes que se pueden aprovechar como complemento de la dieta. Entre sus beneficios está ayudar a reducir el colesterol, aliviar el estreñimiento, reforzar la microbiota intestinal, ayudar al control de peso y regular los niveles de azúcar.

Debido a que el salvado de avena tiene una concentración ligeramente mayor de proteínas que la avena en granos, se puede añadir a yogures y batidos como suplemento nutricional, o en masas de repostería saludable como galletas, tortitas, crepes o panes.

Otra opción para consumirlo es cocinarlo con agua hirviendo, añadiendo un poco de sal y dejando a fuego lento para que adquiera una buena consistencia. Luego, se le puede dar un poco más de sabor agregando una pizca de canela en polvo, fruta picada, miel u otro endulzante de acuerdo al gusto de quien lo consuma.

Según el portal Cuerpo-Mente, por cada 100 gramos de salvado de avena se obtienen 17,3 gramos de proteínas que, en el caso de la avena completa, (serían unos 16,9 gramos de proteínas).