VIDA MODERNA
¿Cómo se debe consumir la remolacha para reducir la presión arterial y la inflamación?
El control de la presión arterial reduce un 40 % la incidencia de accidente cerebrovascular y un 25 % el infarto de miocardio.
La remolacha ayuda a mantener el rendimiento físico mejor que cualquier bebida energética, afirman expertos en salud, pero además, aseguran que una de las variedades de esta hortaliza es que es utilizada incluso como una fuente para la producción de azúcar dado su alto contenido de sacarosa.
Sin embargo, más allá de ser una fuente de azúcar natural, “esta hortaliza es un alimento muy nutritivo, puesto que es aporta potasio, vitamina C y folatos. Además, las remolachas son abundantes en agua y en fibra”, indica el portal especializado Mejor con Salud.
Asimismo, un estudio publicado en la revista médica estadounidense Hypertension mostró que la tensión arterial se reducía en un período de 24 horas tanto en pacientes que habían tomado pastillas de nitrato como en aquellos que bebían jugo de remolacha.
Cabe resaltar que la hipertensión arterial causa más muertes en el mundo que el tabaquismo. Sin embargo, aproximadamente la mitad de la población mundial hipertensa no está controlada en forma adecuada, aun cuando se sabe que el control de la presión arterial reduce un 40 % la incidencia de accidente cerebrovascular y un 25 % el infarto de miocardio, según el Consejo de Hipertensión de la SAC (Sociedad Argentina de Cardiología).
Tendencias
Por otro lado, un estudio previo realizado en Reino Unido había llegó a la conclusión de que consumir diariamente medio litro de jugo de remolacha ayuda a disminuir significativamente la presión arterial en personas con valores normales.
“Demostramos que la remolacha y las cápsulas de nitrato son igualmente eficaces para reducir la tensión arterial, lo que indica que existe un contenido de nitrato en el jugo de remolacha en el que subyace su potencial reductor de la presión”, afirmó la doctora Amrita Ahluwalia, autora del estudio y profesora de farmacología vascular del Hospital Barts y de la Escuela de Medicina de Londres.
Además, los científicos afirman que los vegetales verdes y con hojas como la lechuga y la remolacha son más efectivos a la hora de reducir el riesgo de ataques cardíacos o infartos gracias a su alto contenido inorgánico, que proviene de los nitratos del suelo. “La esperanza es poder aconsejar a la gente sobre la importancia de ingerir una dieta rica en alimentos con nitrato”, señaló la profesora Ahluwalia.
Otro estudio mostró que ingerir diariamente nitrato dietético en forma de jugo de remolacha reduce significativamente la presión arterial elevada en comparación con el placebo en pacientes hipertensos por más de cuatro semanas.
Los resultados arrojaron que hubo una reducción significativa en la presión diastólica y sistólica de la presión arterial tanto medida en casa y forma ambulatoria como en medio hospitalario en los pacientes con ingesta de 250 ml de jugo de remolacha (dosis de nitrato 6.4mmol/dia). Concluyeron que hubo una mejoría en la función endotelial y disminución en la rigidez de las arterias donde se encontró una disminución de 7.7 mmHg en la presión sistólica y 2.4 mmHg en la presión diastólica.
Jugo de remolacha
- Preparar las remolachas, limpiándolas y cortándolas de forma adecuada.
- Primero quitarle las hojas que tenga y retirarle la punta de la raíz con la ayuda de un cuchillo.
- Luego, lavarlas bien para dejarlas libres de cualquier resto de suciedad y retirar la piel con un cuchillo o un pelador.
- Tener en cuenta que también es posible dejar la piel de la remolacha y no quitarla, pero en este caso el jugo final tendrá un sabor más amargo.
- Cortar la remolacha en piezas alargadas y luego juntarlas para cortarlas en cubitos.
- Posteriormente, vertir todos los trozos de remolacha en el vaso de la licuadora y añadir una taza de agua fría.
- Después extraer el zumo de un limón, usando un exprimidor manual o eléctrico y no olvidar colar el líquido obtenido si no se quiere notar restos de pulpa al beber el jugo de remolacha.
- Añadir el jugo del limón exprimido a la licuadora junto a la remolacha y procesar la potencia para que los ingredientes se integren y queden completamente triturados. En el caso de que el jugo de remolacha haya quedado demasiado espeso, se puede añadir un poco más de agua.
- Beber y disfrutar.