Vida Moderna
¿Cómo se debería comer huevo para aumentar los glúteos?
Los huevos contienen albumina, una proteína perfecta para aumentar la masa muscular.
Al hacer ejercicio, las personas temen agrandar ciertas partes de su cuerpo por miedo a subir de peso desmesuradamente y que se engorden las zonas no deseadas. Aunque no existe una dieta para aumentar glúteos y reducir cintura que logre la silueta de reloj de arena deseada, sí existen trucos que elevar y aumentar el volumen de esta zona del cuerpo sin subir de peso de manera general.
Estos son algunos de los consejos que ayudan a la persona a lograr dicho objetivo:
Realizar ejercicios para aumentar glúteos y fortalecer la zona
Esta actividad ayudará a ganar masa muscular, aumentando el tamaño de los glúteos y logrando mayor firmeza. Para aumentar los glúteos de forma natural, es necesario trabajar todo el tren inferior del cuerpo. Por lo tanto, es recomendable que la persona realice una rutina de piernas, pues trabajar los muslos es importante a la hora de tonificar toda la zona inferior.
Hacer ejercicios para trabajar la zona abdominal
Para aumentar los glúteos y mantener una cintura pequeña, es necesario añadir al entrenamiento una serie de ejercicios abdominales intensos. Estos ejercicios permitirán eliminar grasa de dicha zona y mantener una cintura estilizada.
Evitar alimentos innecesarios
Ya que existe una serie de alimentos que la persona debe consumir para aumentar los glúteos rápidamente, también hay una serie de ingredientes que debe evitar si no desea subir de peso y que este se vea reflejado en los brazos, rostro o abdomen. Dentro de los alimentos que debe evitar, encontrará los fritos, aquellos que contienen azúcares añadidos y los alimentos procesados.
Alimentos para aumentar los glúteos rápidamente
Los alimentos ricos en proteínas son los más necesarios para aumentar los glúteos de manera natural. Estos contienen las llamadas ‘súper proteínas’; alimentos con un bajo índice de grasas saturadas y altas cantidades de proteínas. Las ‘súper proteínas’ contienen todos los aminoácidos fundamentales que el cuerpo necesita para construir y desarrollar músculos, por lo que serán esenciales para el aumento natural del glúteo. Estas son las proteínas que no deben faltar en la dieta:
- Huevo: los huevos contienen albumina, una proteína perfecta para aumentar la masa muscular. Es recomendable comer solo las claras o una sola yema.
- Pescado azul: pescados como el salmón, el atún o las sardinas son increíblemente ricos en proteínas.
- Carne roja: otros alimentos para aumentar glúteos rápidamente que no pueden faltar en el menú son la ternera, el pato y el cordero.
- Aves de corral: el pollo sin piel o el pavo son opciones magníficas para aumentar los glúteos de forma natural, ya que son considerados alimentos “súper proteicos”.
- Legumbres: los garbanzos, las alubias y las lentejas son algunas de las legumbres recomendadas para incluir en la dieta.
- Proteína de suero de leche en polvo: si bien es cierto que esta opción es menos natural que las anteriores, se trata de una propuesta sencilla que ayudará a lograr un gran número de proteínas en poco tiempo.
Carbohidratos complejos para ganar glúteos
Además de los alimentos ricos en proteínas, existen otros grandes ingredientes que pueden ayudar a lograr los glúteos que deseados.
Es importante aclarar que, hay mucha gente que descarta los carbohidratos por su alto contenido en grasa, no obstante, expertos en entrenamiento físico recomiendan añadirlos a la dieta, siempre y cuando sean grasas saludables. Es de recordar que las grasas saludables no engordan, al contrario, ayudan a quemar grasa acumulada. Entre los carbohidratos complejos más recomendados para aumentar los glúteos se destacan:
- Pasta
- Arroz
- Cereales ricos en fibra natural
- Harina de trigo
Todos ellos son una fuente de energía que el organismo almacena, no obstante, son los primeros que el cuerpo usará y quemará. Conviene subrayar, que los carbohidratos son grandes alimentos para aumentar glúteos y busto rápidamente, sin embargo, la persona debe evitar las grasas malas, como los fritos, alimentos procesados y azúcares.