VIDA MODERNA
¿Cómo usar la hoja de laurel para bajar de peso de manera natural?
Posee una acción diurética, antifúngica, antirreumática, antiinflamatoria, estimulante, antioxidante y expectorante.
Una de las hierbas naturales más recomendadas por los expertos para bajar de peso es el laurel. Su nombre científico es Laurus nobilis y, según la Fundación Española de la Nutrición, facilita la digestión, mejora y previene la acidez estomacal y los espasmos intestinales.
El portal experto Salud 180 asegura que el consumo de una infusión de esta planta ayuda a bajar de peso naturalmente debido a que combate la retención de líquidos y mejora la digestión.
Las hojas de esta planta son ricas en potasio, magnesio y vitaminas B6, B9 y C, y posee una acción diurética, antifúngica, antirreumática, antiinflamatoria, estimulante, antioxidante y expectorante.
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Las hojas de esta planta también contienen eugenol. Este compuesto puede actuar como un remedio antiinflamatorio. Por lo que si la persona tiene algún tipo de inflamación, puede recurrir a este remedio para aliviarla. Las articulaciones, que en muchas oportunidades se inflaman, pueden ser las más beneficiadas.
¿Cómo preparar esta infusión?
Primera opción:
Se debe colocar en una olla agua y agregar al rededor de 5 hojas de laurel. Esta mezcla se debe dejar hervir y luego reposar por 10 minutos. Se puede tomar dos o tres veces al día sin problema.
Segunda opción:
Esta opción tiene un ingrediente añadido que ayudará a adelgazar aún más. Se necesita laurel, agua y canela. La preparación es la misma y se recomienda beber tres veces al día antes de cada comida, preferiblemente sin endulzante.
Consejos para bajar de peso
El portal especializado Healthline, listó una serie de consejos con los que es posible bajar de peso constantemente y de manera efectiva:
- Evitar bebidas azucaradas: son aquellas que contienen azúcar añadida. Estas incluyen: refrescos, bebidas azucaradas de té y bebidas deportivas, energéticas y jugos. Las calorías en las bebidas azucaradas pueden contribuir al aumento de peso y proveen poco o ningún valor nutritivo.
- Dormir bien: “cuando no se duerme lo suficiente, se puede sentir hambre incluso si se está lleno. La falta de sueño puede conducir a comer en exceso [...]. La consecuencia puede ser un aumento de peso, y dificultades para perderlo”, explica el medio Mejor con Salud.
- Comer alimentos sin procesar: los alimentos mínimamente procesados conservan la mayor parte de sus propiedades físicas, químicas, sensoriales y nutricionales intrínsecas, y muchos de ellos son tan nutritivos como los alimentos sin procesar. Algunos ejemplos son la fruta cortada, la embolsada, las ensaladas de verduras y las frutas y verduras desecadas y congeladas.
- Alimentación saludable: las frutas y las verduras son elementos primordiales para una alimentación saludable como el aprovechamiento de lácteos y/o productos bajos en grasas. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, también se deben incluir proteínas como las carnes, los huevos, las legumbres y hasta las semillas y nueces.
- Comer un desayuno alto en proteínas: un estudio publicado en The FASEB Journal en 2012, encontró que un desayuno con la suficiente cantidad de proteínas mejora el control del apetito, así como la saciedad, y reduce el consumo de pasabocas y comida de paquete, que es poco saludable.
- Beber agua: un estudio que se encuentra en el repositorio de la Librería Nacional de Medicina (NIH, por sus siglas en inglés) explica que el agua quema calorías y acelera el metabolismo, y aquellas personas que opten por ingerirla, deben optar por realizar ejercicio físico en casa.
- Comer fibra: de acuerdo con MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Salud de Estados Unidos, la fibra tiene múltiples beneficios para la salud, pues le aporta volumen a la dieta. También, provoca una sensación de saciedad, haciendo que las personas se sientan llenas rápidamente. Esto facilita el proceso de pérdida de peso y ayuda a mantener un peso saludable.
- Ingerir los alimentos lentamente: es recomendable masticar los alimentos entre 30 y 50 veces por bocado. Además, investigadores encontraron que el hecho de comer lento y masticar bien ayuda a mejorar la circulación sanguínea en el abdomen.