VIDA MODERNA
Consumir esta fruta ayuda a prevenir el Alzheimer y el Parkinson
Estas enfermedades afectan de forma diferente a hombres y mujeres.
La Alzheimer es un trastorno cerebral que destruye lentamente la memoria y la capacidad de pensar y, con el tiempo, la habilidad de llevar a cabo las tareas más sencillas. De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Mientras que el Parkinson, es un trastorno del movimiento que se da cuando las neuronas no producen la cantidad suficiente de dopamina. Según indica Medline Plus, en algunos casos la causa es la genética, pero no suele presentarse en más de un miembro de la familia.
Aunque estas son enfermedades degenerativas, no afectan de igual forma a hombres y mujeres. Pues, existen diferentes factores genéticos, hormonales, neuroendocrinos y moleculares que están implicados en las diferencias en la patogenia de la enfermedad en cada persona.
Por ejemplo, la incidencia y prevalencia del Parkinson, según estudios, es entre 1,5 y 2 veces mayor en hombres que en mujeres. En las mujeres el inicio de la enfermedad es ligeramente más tardío que en hombres.
Tendencias
En ese sentido, es importante que tanto hombres como mujeres cuiden su alimentación y eviten llenar al organismo de comida chatarra o que no aporte las vitaminas y minerales que necesita para funcionar de manera óptima. De acuerdo con el portal, Cocina Vital es posible encontrar un alimento que trae grandes beneficios para la salud y ayuda a combatir el Alzhéimer y el Parkinson.
Se trata de la ciruela, la cual es una de las frutas que se llevan el título de ‘superalimentos’, esto debido a que en su composición nutricional pueden encontrarse diferentes vitaminas y minerales. Según la Fundación Española de la Nutrición, esta fruta tiene diferentes variaciones, desde su color amarillo, rojo, negro o verde -de lo cual también depende su sabor, siendo unas más ácidas que otras-.
Sobre su contenido en nutrientes, la entidad señala que se trata de una fuente de minerales como el potasio y el calcio, que contribuyen al bienestar del organismo. Pero, además, es una fuente de vitaminas como la A y la C, que son reconocidas por su efecto antioxidante.
El sabor de la ciruela depende, en general, de la variedad: las amarillas son ácidas y jugosas; las rojas, dulces; las negras tienen un sabor dulce y aromático, mientras las verdes suelen ser muy dulces.
Beneficios
- Su contenido de vitamina C ayuda en la síntesis y mantenimiento del colágeno de la piel.
- Los polifenoles y el potasio favorecen el incremento de la densidad ósea, previniendo la osteoporosis y la osteopenia.
- Su riqueza en antocianos tiene una acción antiséptica que ayuda a combatir procesos infecciosos.
- Los flavoides fenólicos, las antocianinas, el ácido clorogénico, la quercetina y las catequinas poseen efectos antiinflamatorios sobre las células del organismo.
- La fibra insoluble de la cáscara mejora el tránsito intestinal.
- Su alto contenido de fibra soluble ayuda a eliminar grasas, azúcares, bacterias y toxinas del tracto digestivo.
- Las fibras solubles ayudan a reducir los niveles de colesterol en la sangre.
- Previene el daño celular, producido por los radicales libres, gracias a sus antioxidantes.
- La vitamina K evita la formación de calcio o ateromas que provocan la aterosclerosis.
- Los fitonutrientes previenen patologías neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson.
Hay que precisar que la dieta debe ser balanceada y no solo estar basada en ciruelas, para así poder disfrutar de sus beneficios. También debe ser un plan que esté acompañado de otros hábitos saludables dentro del estilo de vida, como la práctica moderada de actividad física, siendo lo mínimo necesario 30 minutos al día, según indican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos.
Hábitos para la memoria que combaten el Alzheimer
Una de las enfermedades más diagnosticadas durante la etapa del envejecimiento es el Alzheimer, esta es la forma más común de demencia, según menciona la biblioteca nacional de medicina y salud de los Estados Unidos, MedlinePlus.
Los primeros síntomas, luego de que un paciente ha sido diagnosticado con Alzheimer, es que empieza a olvidar acontecimientos que ocurrieron días e incluso horas atrás, por lo general, olvidan los nombres y el parentesco que tienen con las personas que los rodean; esto se debe a que las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje se ven fuertemente afectadas.
Con el paso de los meses o años, estos pacientes requieren de una persona que esté con ellos de manera permanente, ya que no pueden salir solos e incluso empiezan a olvidar cosas tan básicas como comer, controlar esfínteres, hablar, etc.
Para poder prevenir este tipo de padecimiento, la alimentación juega un papel importante. Un estudio publicado recientemente en The British Medical Journal (BMJ), halló que un estilo de vida saludable, en particular una buena alimentación, se asocia con un deterioro más lento de la memoria, incluso en quienes tienen el gen de la apolipoproteína E (APOE), el factor de riesgo conocido más fuerte para la enfermedad de Alzheimer y otras demencias relacionadas.
Por medio de esta investigación los profesionales de salud buscaban encontrar el perfil de estilo de vida más apropiado para contrarrestar los efectos del envejecimiento y prevenir diversas patologías, en especial, aquellas, que afectan de manera directa la salud del cerebro.
En medio del estudio, los científicos analizaron datos de 29 mil adultos mayores de 60 años con un funcionamiento normal de su cerebro y neuronas. Todos los pacientes pertenecían al Estudio de Cognición y Envejecimiento de China. Cabe mencionar que el gen APOE se identificó en uno de cada cinco pacientes.
En medio de la investigación estos fueron los factores de vida saludable que se dieron a conocer en determinados pacientes y que ayudan a prevenir el Alzheimer y otro tipo de padecimiento que afectan de manera directa la salud del cerebro:
- Una dieta saludable donde prime el consumo de proteínas magras como los pescados; estos productos tiene un alto contenido de omega-3 y de antioxidantes que previenen diversas enfermedades neurodegenerativas.
- También es crucial el consumo de frutas y verduras a diario.
- La alimentación debe ir de la mano de la práctica de algún deporte o actividad física. Los especialistas recomiendan que esta se lleve a cabo, como mínimo, completando 150 minutos a la semana.
- Tener una vida social activa (como mínimo tener charla con amigos o seres cercanos dos veces por semana).
- Realizar algún tipo de actividad cognitiva como juegos de concentraciones o lectura. (Al menos dos veces por semana).
- No fumar.
- No beber bebidas alcohólicas.
Los pacientes que cumplían con al menos cuatro o seis de los hábitos antes mencionados fueron catalogados como personas con un estilo de vida saludable. Si llevaban a cabo dos o tres factores, eran clasificados en el grupo desfavorable y los que se identificaban con uno o ninguno fueron divididos entre portadores y no portadores de APOE.
Para finalizar, los investigadores encontraron que cada comportamiento saludable individual se asoció con una disminución de la memoria más lenta que el promedio durante 10 años. Los pacientes que tenían una dieta sana y equilibrada tuvieron un efecto a la hora de evitar el deterioro de la memoria, seguida de la actividad cognitiva y luego de la actividad física.
Por su parte, con el gen APOE con estilos de vida favorables y promedio experimentaron una disminución de la memoria más lenta.