Vida Moderna
Consumir esta fruta diariamente ayuda a prevenir la diabetes y favorece la cicatrización
La guayaba aporta una importante cantidad de vitamina C, incluso mayor a los cítricos, que ayuda al cuerpo y al sistema inmunológico.
La guayaba es una fruta tropical, nativa de América, que aporta múltiples beneficios a la salud, no sólo por ser una fuente rica en vitamina C, incluso más que lo que aportan los cítricos; sino porque además contiene fósforo, niacina, potasio, vitaminas A y B, hierro, calcio y ácido fólico.
Su nombre científico es el Psidium guajava, y por lo general posee una pulpa rosada; aunque también puede ser de color rojo, blanco, e inclusive, anaranjado. En cuanto a su sabor, es dulce en la mayoría de los casos, pero también es ácida y agria. Además, puede consumirse directamente o en jugo, pero si se desea, se puede ingerir como ingrediente dentro de algún plato en específico, como postres o dulces, por ejemplo.
Según información del portal de bienestar y salud Tua Saúde, este fruto tiene propiedades antioxidantes, antidiabéticas, antihipertensivas, antiinflamatorias, analgésicas, hipocolesterolémicas, antiespasmódicas, antimicrobianas y astringentes.
Los profesionales de la salud recomiendan el consumo frecuente de esta fruta, debido a que contribuye a la producción de colágeno, como también ayuda al fortalecimiento de los huesos y dientes. Al igual que favorece la absorción del hierro de los alimentos y que el cuerpo genere resistencia frente al contagio de infecciones y virosis.
Por otra parte, se dice que la guayaba aumenta la producción de insulina, hormona que se encarga de permitir el paso de la glucosa a las células para que estas la conviertan en energía. Mejor con Salud cita una investigación realizada por el All India Institute of Medical Sciences, en la que se destacan las bondades del jugo de esta fruta para controlar la diabetes y sugiere que debe prepararse con la fruta sin piel.
Tanto la fruta como las hojas del guayabo sirven para tratar este padecimiento de forma natural. Un estudio publicado en la revista Nutrition and Metabolism concluyó que el extracto de hoja de guayaba puede reducir los niveles de glucosa en la sangre después de las comidas. En el análisis se determinó que este producto tiene la posibilidad de inhibir la acción de la alfa-glucosidasa, una enzima que descompone el almidón y otros hidratos de carbono para convertirlos en glucosa.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Más beneficios
Al ser rica en fibras, esta fruta ayuda a estimular los movimientos intestinales, previniendo el estreñimiento. Además, cuando se ingiere con cáscara ayuda a combatir la acidez estomacal, siendo excelente para complementar el tratamiento de úlceras gástricas y duodenales.
Se debe destacar que las hojas de la guayaba posee propiedades astringentes, antiespasmódicas y antimicrobianas, que contribuyen a disminuir tanto la diarrea (aguda o crónica), el dolor abdominal y los posibles microorganismos causantes de la misma, de allí que los expertos recomienden prepararla en forma de té para tratar enfermedades como gastroenteritis y la disentería infantil.
Y aunque usted no lo crea, si se incorpora esta fruta en una dieta para bajar de peso, será un buen aliado en ese propósito, ya que al contener fibra, esto favorece la sensación de saciedad, disminuyendo el hambre. Inclusive, gracias a esas fibras, con la ingesta regular de guayaba se puede favorecer la disminución el colesterol LDL o “malo”, debido a que al reducir su absorción, se disminuye su cantidad en la sangre y contribuye a su excreción en la bilis.
Por último y no menos importante, se ha identificado que el consumo de guayaba roja o rosada es excelente para la piel, ya que aporta licopeno que es un compuesto antioxidante que protege la dermis del daño causado por los rayos ultravioleta y a regular la cantidad de radicales libres circulantes en el cuerpo, previniendo así el envejecimiento prematuro de la piel. Además, ayuda a aumentar las células de defensa del organismo, debido a su alto aporte en vitamina C, lo que ayuda al mejoramiento del sistema inmunológico; el cual, a su vez, hace que haya una mayor resistencia a contraer virus o bacterias.