VIDA MODERNA

Coronavirus: ¿cómo evitar que se propague en sitios cerrados?

Investigadores de la Universidad Yale revelaron las mejores condiciones para frenar el covid-19 en lugares cerrados.

1 de abril de 2020
| Foto: AirBnb

Un equipo de investigadores de la Universidad Yale hizo la revisión de una investigación propia sobre la transmisión de los virus respiratorios en la que explica cuáles son las mejores condiciones para evitar la propagación del coronavirus en lugares cerrados.

En su estudio, los científicos de Yale comprobaron que el aire frío y seco en época de invierno ayuda a que el SARS-CoV2 se propague entre las personas.

En cambio, cuando aumenta la humedad durante la primavera y el verano, el riesgo de transmisión del virus disminuye tanto en el exterior como en lugares cerrados, como oficinas u hogares.

Por este motivo, los habitantes de Europa y Estados Unidos están esperanzados que con un clima más húmedo el virus deje de propagarse a la velocidad que lo está haciendo en la actualidad

Los hallazgos del estudio que se publicó en Annual Review of Virology se refieren a la contaminación por medio del aire y no al contacto directo, que es lo que se ha tratado de disminuir por medido de las medidas de aislamiento dispuestas para casi la mitad de los habitantes del planeta.

Es más, hasta en los ambientes más húmedos se transmite el virus con facilidad, como es el caso de los países ecuatoriales, en donde la pandemia también ha sido contundente. Por eso es importante lavarse las manos y evitar el contacto social tanto y como sea posible.

El jefe de la investigación Akiko Iwasaki, inmunólogo de la Universidad Yale, descubrió que cuando el aire exterior frío y con poca humedad se calienta en el interior de un sitio, la humedad del aire cae aproximadamente un 20 %. Y ese aire menos húmedo facilita la no propagación de las partículas de virus como el SARS-CoV2.

En la investigación también se encontró que el aire cálido y seco disminuye la capacidad de los cilios, estructuras celulares que se caracterizan por presentarse como apéndices con aspecto de pelo que recubren las partículas y sirven para expulsar partículas virales.

Una recomendación de Iwasaki es el “uso de humidificadores en los edificios”, sobre todo cuando hay aire seco en el ambiente.

Estudiando virus en ratones, en ambientes con entre 40 y 60 por ciento de humedad relativa, los roedores mostraron una menor capacidad para transmitirlo que en ambientes más secos.

Sin embargo Iwasaki alerta que el virus se transmite fácilmente de persona a persona, por lo que se debe mantener el aislamiento y el hábito de lavarse las manos.