Vida Moderna
Crujidos en las rodillas: cuáles son las causas y cómo aliviar el dolor
Los problemas en estas articulaciones son muy comunes y pueden ocurrir a cualquier edad.
La rodilla es una articulación que une el hueso del muslo a la parte superior del de la espinilla y está compuesta por cartílagos, músculos, ligamentos y tendones, según el portal de salud KidsHealth.
Además, el portal web señaló que estas partes funcionan conjuntamente para que las piernas se doblen, se estiren, pivoten y roten, pero una lesión de rodilla puede afectar a una o más partes de esta.
Por tal razón, la doctora Mercè Torra, del Servicio de Rehabilitación del Hospital Universitario MútuaTerrassa (Barcelona), le explicó al portal Saber Vivir TV que cuando las rodillas crujen es porque “el movimiento provoca que esas pequeñas burbujas que contienen gas exploten, produciéndose el característico crujido”.
No obstante, si los crujidos son frecuentes y hay dolor, bloqueo y sensación de inestabilidad, esto es una señal para preocuparse, pues la especialista le dijo al portal que puede ser un síntoma de luxaciones, roturas de menisco, desgaste articular, entre otras.
Asimismo, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explicó que la ubicación e intensidad del dolor de rodilla puede variar según la causa del problema y que los signos y síntomas que a veces acompañan esta afectación son: inflamación y rigidez, enrojecimiento y temperatura al tacto, debilidad o inestabilidad, sonidos de chasquidos o crujidos e incapacidad de enderezar completamente la rodilla.
Por tal razón, la entidad sin ánimo de lucro señaló que no siempre es posible prevenir el dolor de rodilla, pero las siguientes sugerencias pueden ayudar a prevenir lesiones y el deterioro de las articulaciones:
- Mantener un peso adecuado es una de las mejores cosas que se puede hacer para las rodillas. Todo peso extra implica presión adicional sobre las articulaciones y aumenta el riesgo de lesiones y artrosis.
- Antes de hacer ejercicio, realizar calentamiento, a fin de preparar los músculos para las exigencias del deporte.
- Tener cuidado con los ejercicios, asegurarse de usar la mejor técnica y los patrones de movimiento correctos en el deporte o actividad y, para hacerlo, pueden ser de utilidad las clases con un profesional.
- Ganar fortaleza y mantener la flexibilidad. La debilidad muscular es la principal causa de las lesiones de rodilla, por ello es importante fortalecer los cuádriceps y músculos isquiotibiales (ubicados en la parte delantera y trasera de los muslos, que ayudan a sostener las rodillas). El entrenamiento para mejorar el equilibrio y la estabilidad ayuda a que los músculos que rodean las rodillas trabajen juntos con más eficacia.
- Hacer ejercicio con inteligencia. Si se tiene artrosis, dolor crónico de rodilla o lesiones recurrentes, tal vez se necesite cambiar la forma de ejercitarse. Nadar, hacer aeróbicos acuáticos u otra actividad de bajo impacto, al menos unos días a la semana. En ocasiones, limitar las actividades de alto impacto es suficiente para aliviar el dolor.
Asimismo, la especialista recomendó no sobrepasar los 90º de flexión de rodilla si la persona debe estar mucho tiempo sentada.
Por su parte, la alimentación también es clave para reducir los dolores de rodilla, ya que es importante evitar la comida chatarra, porque esto podría desarrollar enfermedades como el sobrepeso. Además, porque no aportan nutrientes, sino que más bien tiene un exceso de grasa, azúcar y sal.
Otra recomendación de alimentación es comer huevos, porque esto protege las articulaciones. Asimismo, es ideal consumir pescados tres veces a la semana y tomar suero de leche por el calcio, ya que esto disminuye las molestias de los dolores de rodilla.
De igual forma, la revista Mejor con Salud recomendó comer banano, pues este alimento tiene potasio y magnesio y estos minerales ayudan a mejorar la salud de los huesos.
Los fríjoles ayudan a reducir los dolores de rodilla, aportando a la regeneración de los ligamentos. Otro es el aguacate, ya que es una fuente de ácidos grasos monoinsaturados, ácidos grasos insaturados, potasio y vitaminas C, E y B6.