Vida Moderna
¿Cuál es el mejor lugar para guardar y prolongar la durabilidad de los huevos?
Es importante conocer cómo preservar un alimento rico en proteínas, vitaminas y minerales.
El huevo se ha convertido en un alimento infaltable en la dieta diaria de los colombianos. De hecho, es uno de los componentes básicos que hace parte de los desayunos, siendo fuente principal de proteínas, vitaminas y nutrientes necesarios para comenzar el día cargado de energía.
Aunque, en los últimos tiempos se ha reportado un importante incremento en el precio de este alimento, el huevo sigue siendo catalogado como un producto de fácil acceso para los consumidores, que además tiene como gran virtud su versatilidad en cuanto a los métodos de preparación y su riqueza nutricional.
Sin embargo, existe una pregunta que en muchos casos invade a los colombianos y es el saber cómo guardar y preservar la durabilidad de los huevos, manteniéndolos alejados de bacterias u organismos que puedan dañar el alimento o provocar graves daños en la salud.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE. UU., precisaron que “los huevos son uno de los alimentos más nutritivos y económicos que nos ofrece la naturaleza, pero pueden causar enfermedades si no se manipula y cocinan de manera adecuada. Esto se debe a que los huevos pueden estar contaminados con salmonella, una bacteria que enferma a las personas”.
Los expertos recomiendan que inmediatamente después de la compra, cuando la persona se encuentre en su casa o lugar de residencia, lo ideal es que los huevos sean refrigerados, o en su defecto, si se van a conservar a temperatura ambiente estable y seco, evitando mucho frío o lo caliente que facilite la condensación y la penetración de los patógenos de la cáscara hacia el interior del huevo.
A temperatura ambiente, muchos aseguran que el huevo puede llegar a durar aproximadamente 2 a 3 semanas. Sin embargo, si se guarda en un lugar más fresco, como en el interior de la nevera, un huevo prolongar mucho más su durabilidad, de hasta 2 meses.
Cuando el huevo vaya a ser usado, lo ideal es que no pase mucho tiempo expuesto tras haber sido retirado del interior de la nevera a temperatura ambiente, ya que las variaciones significativas de temperatura favorecen el desarrollo de bacterias, como la salmonela, el cual causa una infección alimentaria.
La salmonelosis es una enfermedad bacteriana común que afecta el tubo intestinal. La bacteria de la salmonela generalmente vive en los intestinos de animales y humanos, y se expulsa mediante las heces (materia fecal). Sus síntomas suelen ser lo de una gastroenteritis, a veces aguda.
Aunque, si esta proteína se almacenaba a temperatura ambiente en la tienda, no es necesario guardarlos en el frigorífico. Sin embargo, si ha decidido colocarlos en frío, hay que asegurarse de consumirlos rápidamente después de sacarlos.
Formas de consumirlo
Las formas más populares de prepararlos en países como Colombia son haciendo los huevos tibios, duros, fritos y revueltos. No obstante, las posibilidades resultan ser infinitas si se le combina con otros alimentos en medio de recetas más elaboradas.
Según los expertos, los modos más sanos de preparación del huevo son aquellos que implican la menor incidencia de grasas y las preparaciones que contemplan menores tiempos de cocción, para evitar perder algunos de sus nutrientes; situación a la que este alimento también se somete al estar expuesto a altas temperaturas.
En ese sentido, en materia de preparaciones saludables de huevo, resulta clave optar por recetas que no representen periodos extensos de cocción, sin que ello represente un guiño al consumo de huevo crudos, porque incluso, se ha demostrado que algunos nutrientes quedan más expuestos cuando este alimento en efecto se cocina, ayudando además a que nutrientes como la biotina resulten ser más fáciles de absorber.