¿Cuáles son las mejores vitaminas para el cabello y las uñas?

Las vitaminas son nutrientes esenciales para el funcionamiento de varios aspectos de la salud, los cuales se encuentran por montones en los alimentos. Uno de los beneficios de estos nutrientes es conservar el cuidado del cabello y uñas.

Uno de los asuntos estéticos con mayor importancia es el cuidado del pelo y uñas. Con el paso del tiempo y la influencia del medio ambiente, estas zonas tienden a deteriorarse con facilidad.

Por el lado del pelo, las afectaciones más notables son la resequedad, presencia de caspa o caída prematura. Para el caso de las uñas, estas pueden romperse con facilidad. Si se desea impedir esto, el consumo de determinadas vitaminas es fundamental para fortalecer ambas zonas.

Los expertos del informe ‘Micronutrientes para cabello y uñas’ señalan que la biotina, vitamina C, E, A y D son esenciales para el cuidado. Estos nutrientes juegan un rol importante en conservar el cabello fuerte y sano, e impedir la ruptura de las uñas, sumado a que mejoran la complexión y textura de la piel. Prácticamente, las vitaminas cumplen varias funciones al mismo tiempo.

La biotina es una de las vitaminas que más contribuye al mantenimiento del cabello sano, debido a que le proporcionan volumen y brillo. Este nutriente ejerce la función de coenzima, lo cual estimula a otras enzimas en la duplicación celular.

Por ende, favorece al crecimiento de los tejidos de rápida reproducción, tales como la piel, uñas y cabello. Además, interviene en el metabolismo de las grasas y aporta en la elasticidad de los tejidos anteriormente mencionados.

De igual modo, esta vitamina estimula la circulación sanguínea, lo cual permite que el resto de nutrientes lleguen con facilidad a todo el cuerpo.

Respecto a la vitamina C, este nutriente estimula la producción de colágeno, lo cual es esencial para que el cabello no caiga ni tampoco las uñas. Con el cuero cabelludo, los expertos indican que la vitamina favorece el desarrollo de melanina, lo cual es el componente que mantiene el tono unificado y sin acumulación de grasa.

La producción de colágeno estimula a los tejidos que recubren los tejidos de las uñas, lo cual impide que se rompan con normalidad y así crezcan con facilidad. Este efecto ocurre del mismo modo con la vitamina E.

La ingesta frecuente de este nutriente estimula la producción de sebo, lo cual se traduce como mayor hidratación del pelo. Adicionalmente, mejora el flujo sanguíneo del cuero cabelludo, estimulando así la mejor absorción de los nutrientes e impide la resequedad.

Por otro lado, la siguiente vitamina importante es la A. Con respecto al cabello, los especialistas en la materia señalan que este nutriente es vital para cabellos resecos, debido a que tiene propiedades antioxidantes que produzcan el sebo necesario para lubricar los folículos de la cabeza. La vitamina ayuda a combatir la caspa, por el hecho que impide que la deshidratación sea notable.

Aquella función antioxidante también incide en las uñas, debido a que las protege de los radicales libres presentes en el exterior y así prevenir que luzcan con un tomo quebradizo. Como esta vitamina se encuentra en cítricos como limón o pimiento, es recomendado aplicar el jugo de estas frutas sobre las uñas.

Para impedir la caída del pelo, la vitamina D cumple un papel crucial. La carencia de este nutriente genera que los tejidos estén débiles, estáticos y quebradizos. En consecuencia, no tener niveles suficientes de este nutriente aceleran la pérdida de cabello.

De la misma forma, esta vitamina fortalece a las uñas, no solo en impedir que parezcan quebradas, sino que les ofrece brillo y les da color, para que no parezcan opacas y sin crecimiento rápido.