¿Cuáles son los beneficios del té de zanahoria y cómo prepararlo?

La zanahoria suele ser considerada como un alimento infaltable para muchos hogares, siendo incluida en la preparación de sopas -por ejemplo- o de manera directa en ensaladas y jugos. Incluso, también es tenida en cuenta en el campo de la repostería y la medicina tradicional para tratamientos caseros.

El valor nutricional de la zanahoria la precede. De acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición, contiene una cantidad apreciable de hidratos de carbono, pero la cualidad por la que más destaca es su alto contenido de vitamina A. De hecho, anota que “una zanahoria de tamaño medio cubre el 89 % de las necesidades diarias de esta vitamina para hombres de 20 a 39 años y el 112 % para mujeres de la misma edad”.

Además, la zanahoria posee carotenoides con actividad provitamínica A (que una vez en el organismo se transforman en vitamina A). Este nutriente contribuye al mantenimiento de la visión, la salud de la piel y las mucosas en condiciones normales. Otras vitaminas presentes en cantidades más discretas son la vitamina C y la vitamina B6, así como minerales hierro, yodo y potasio.

La zanahoria, en conjunto con frutas, verduras, proteínas y -en general- un programa de alimentación saludable, forma parte de las recomendaciones habituales de los nutricionistas. Incluir esta hortaliza en la dieta puede ser benéfico para el organismo, ya sea como acompañante de otras preparaciones, cocida, cruda, en jugo o a manera de té. Sobre esta última opción, el portal Debate comparte una receta recomendada para potenciar las cualidades de la zanahoria.

¿Cómo prepara té de zanahoria?

Según la Fundación Española de la Nutrición, el primer paso consiste en reunir zanahorias frescas, que tengan un color naranja brillante. Posteriormente, se lavan y se procede a rallarlas para obtener dividir la hortaliza en pequeñas fracciones.

En una olla, se agregan dos tazas de agua y se calienta a fuego medio. Luego, se agregan cuatro cucharadas de zanahoria rallada y se tapa para que la mezcla se cocine. Una vez comience a hervir, se apaga el fuego y se deja reposar durante diez minutos. Finalmente, se puede endulzar al gusto o consumirla directamente.

Beneficios del jugo de zanahoria

De acuerdo con el World Cancer Report 2014, de la Organización Mundial de la Salud citado por El Universal de México, la zanahoria forma parte del grupo de alimentos con “efectos prometedores” en la prevención de algunos tipos de cáncer.

Esto debido a su poder antioxidante en la reducción de los radicales libres en el organismo, los cuales se pueden acumular en las células y dañar otras moléculas, como el ADN, los lípidos y las proteínas, aumentando así el riesgo de cáncer y otras enfermedades.

No obstante, el jugo de zanahoria tiene otras cualidades: beneficia la visión, ya que este alimento contiene vitamina A y esta es importante para la visión normal, según el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés). Es importante resaltar que su consumo no logra devolver la visión ni mejorar los padecimientos que ya se tienen, pero lo que sí puede lograr es evitar la degeneración macular, las cataratas, así como prevenir la ceguera. Sumado a esto, debido a que este alimento también contiene luteína, este antioxidante protege los ojos de la luz dañina.

Por su parte, el jugo de zanahoria ayuda a un mejor metabolismo y a perder peso. Según Healthline, consumir jugo de zanahoria aumenta la secreción de bilis, lo que acelera el metabolismo. Ahora bien, para aquellos que buscan perder peso, esta bebida puede ser el reemplazo de bebidas azucaradas que no son nada recomendables en las dietas sanas. Gracias a que es bajo en calorías, además de refrescar, el jugo de zanahoria ayudará a perder esos kilitos de más.

¿Cómo preparar jugo de zanahoria?

Ingredientes:

- Cuatro zanahorias

- Tres vasos de agua

Preparación:

- Lavar y pelar las zanahorias. Luego, se procesan en la licuadora con el agua hasta obtener una mezcla homogénea.

Asimismo, otra manera de preparar jugo de zanahoria es con miel y para hacer la preparación se requiere de cuatro zanahorias, un limón, tres vasos de agua y miel. Una vez listas y lavadas, se debe proceder a cortar la zanahoria en cubitos y verterlos junto con el limón y el agua en la licuadora.

Una vez se haya obtenido una mezcla homogénea, se puede colar o beber directamente. En caso de querer agregar un toque dulce, se le puede adicionar un poco de miel.