Cuatro miembros de una misma familia murieron a causa de la covid-19

Tracy Latham estaba comprometida para casarse con Darren Fisher después de convivir 12 años y compartir la crianza de los hijos de ella. Pero en lugar de boda hubo funeral. Todo por culpa de la pandemia. El hecho sucedió en Mackworth, Derby, en el centro de Inglaterra. Hoy Tracy culpa al primer ministro del Reino Unido por haber relajado las medidas de protección durante las fiestas de fin de año. Su familia había permanecido confinada desde marzo de 2020 y hasta el momento habían esquivado al mortal virus. Pero ante la apertura, los Fisher se reunieron en Navidad y la tragedia llegó a sus vidas. Por eso, Latham culpó a Boris Johnson de tener “sangre en las manos” ya que su pareja, Darren Fisher, los padres y el tío de él, murieron en el lapso de dos semanas.

En navidad, Darren visitó a sus padres solo por dos horas. En el transcurso de la semana siguiente, todos dieron positivo: Pat y David Fisher, de 79 y 82 años; y su tío, Michael Wilson, quien tenía un poco más de 70. Pat, la única que tenía una enfermedad preexistente, se lastimó una pierna el 26 de diciembre. Al día siguiente fue ingresada en el Royal Derby Hospital, se quejaba de sentirse muy adolorida y agotada. Dos días después su salud empeoró.

De manera simultánea, Darren comenzó a presentar síntomas de resfriado y ya para el 29 de diciembre respiraba con tal dificultad que tuvieron que pedir una ambulancia que lo llevara al mismo hospital. El viernes, 1 de enero, él llamó a su prometida para avisarle que lo iban a conectar a un ventilador. Tracy le rogó que se recuperara. Esas fueron las últimas palabras que compartieron. Estuvo conectado al ventilador durante nueve días. Mientras él luchaba por su vida fallecieron sus familiares.

El lunes 4 de enero su padre, quien tenía demencia senil, murió en el hogar de paso a donde lo habían llevado para que no estuviera solo. El martes, Pat también perdió su batalla con el virus, que ha liquidado a más de 2 millones de personas en el mundo. Fue algo devastador. El tío Michael murió unos cuantos días después. En dos semanas la familia Fisher perdió a cuatro de sus miembros más queridos. Darren no pudo cumplirle la promesa a su pareja.

Aún no se ha fijado una fecha para sus funerales y Latham, de 50 años, dice que siempre lamentará a vivir bajo el gobierno de un irresponsable que solo ha atinado a decir que: “Lamento profundamente cada una de las vidas que se han perdido y asumo la responsabilidad completa por todo lo que ha hecho el Gobierno para abordar la crisis sanitaria”.

Para Tracy Latham, las palabras de Boris Johnson, pronunciadas en una rueda de prensa, son un desatino: “Tiene el descaro de decir que lo siente, no tiene ni idea. El gobierno no ha hecho lo suficiente, el cierre fue muy corto y demasiado tarde. Eso no va a traer de vuelta a mis seres queridos”, dice.

A su pareja la recordará siempre con su sonrisa pintada en la cara, hasta para los clientes de Sainsbury’s, la segunda cadena de supermercados más grande del Reino Unido, en donde trabajó por 18 años. Además, Darren era un fanático del Derby County Football Club que actualmente juega en Championship, la segunda división del fútbol inglés. “Era su vida. Asistía a todos los partidos con sus amigos”.

En medio del dolor, Tracy lanzó una severa advertencia a las personas que no se están tomando en serio la pandemia. “Por favor. La mamá y el papá de Darren se protegieron durante casi un año y pensaron que estaban a salvo. Lo que nos entristece ahora es la muestra de que le puede pasar a cualquiera, en un abrir y cerrar de ojos”.

Otro de los tíos de Fisher, Geoffrey, también contrajo la enfermedad cuando fue a cuidar a su padre. La familia espera que se recupere pronto, para poder realizar las exequias de los que fallecieron.

Mientras tanto Tracy pide ayuda en un crowdfunding para poder despedirlo dignamente: “Las palabras me fallan en este momento en el que todo mi mundo se ha hecho añicos. Me siento destruida. Darren era la persona más encantadora y amable que he conocido. La covid-19 se lo llevó el 11 de enero de 2021 a las 8:00 de la mañana. Teníamos muchos planes juntos: ¡Una boda, después de 12 años! Ahora me encuentro organizando su funeral. Solo tenía 48 años y le quitaron la vida. Él era mi alma y el amor de mi vida. Estará para siempre en mi corazón, cada minuto de cada día”.