Cuidado: estos son los alimentos que podrían desencadenar el síndrome de Guillain-Barré

El síndrome de Guillain-Barré (GBS) es una enfermedad neurológica rara, pero potencialmente grave que afecta el sistema nervioso periférico. Sus síntomas pueden variar desde debilidad muscular hasta parálisis total y, en casos extremos, puede ser fatal.

Aunque su causa exacta no se comprende completamente, se cree que ciertos alimentos pueden desencadenar esta condición en individuos susceptibles. Estos tres alimentos podrían estar asociados con el síndrome de Guillain-Barré, de ahí la importancia de la precaución al momento de consumirlos.

Mariscos contaminados: Un riesgo latente en los mares y océanos

Los mariscos, particularmente los moluscos bivalvos como las almejas, los mejillones y las ostras, son conocidos por ser portadores potenciales de bacterias y toxinas peligrosas.

Entre estas toxinas, la más preocupante es la bacteria Campylobacter jejuni, que puede encontrarse en aguas contaminadas. Se ha observado que la infección por Campylobacter es un desencadenante conocido del síndrome de Guillain-Barré.

La ingestión de mariscos crudos o mal cocidos que albergan esta bacteria puede aumentar el riesgo de desarrollar esta enfermedad neurológica. Por lo tanto, es esencial asegurarse de que los mariscos estén frescos y preparados adecuadamente antes de consumirlos, especialmente para aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos.

Carne de ave mal cocida: un peligro oculto en la cocina

La carne de aves, como el pollo y el pavo, es una fuente común de proteínas en muchas dietas. Sin embargo, cuando no se cocina completamente, puede representar un riesgo significativo para la salud.

La bacteria Campylobacter jejuni, que también se encuentra en las aves de corral, puede transmitirse a los humanos a través de la ingestión de carne de ave cruda o insuficientemente cocida. Esta bacteria no solo puede causar gastroenteritis, sino que también se ha relacionado con el desarrollo del síndrome de Guillain-Barré. Por lo tanto, es fundamental asegurarse de cocinar completamente la carne de ave y practicar una buena higiene en la cocina para reducir el riesgo de contaminación bacteriana.

Productos lácteos sin pasteurizar: un posible desencadenante de riesgo

Aunque los productos lácteos sin pasteurizar, como la leche cruda y el queso artesanal, pueden tener un sabor distintivo y atraer a los amantes de la comida gourmet, también conllevan un riesgo significativo para la salud. Estos productos pueden contener bacterias peligrosas como Listeria, Salmonella y Campylobacter, todas las cuales se han asociado con el desarrollo del síndrome de Guillain-Barré.

La pasteurización es un proceso crucial que mata estas bacterias patógenas, lo que hace que los productos lácteos pasteurizados sean mucho más seguros para el consumo.

Es importante tener en cuenta que las personas con sistemas inmunológicos comprometidos, como los ancianos, los niños y las mujeres embarazadas, corren un mayor riesgo al consumir productos lácteos sin pasteurizar.

En conclusión, si bien el síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad poco común, es crucial tener en cuenta los posibles desencadenantes alimentarios que podrían aumentar el riesgo de desarrollar esta afección. Mantener prácticas de seguridad alimentaria adecuadas, como cocinar completamente los alimentos y evitar el consumo de productos potencialmente contaminados, puede ayudar a reducir el riesgo de esta enfermedad neurológica grave.

Si experimenta síntomas como debilidad muscular inexplicable o entumecimiento, es fundamental buscar atención médica de inmediato para un diagnóstico y tratamiento adecuados.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.