Vida Moderna
De esta manera se puede mejorar la circulación sanguínea del cerebro
Es importante mantener hábitos sanos que favorezcan el cuerpo.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, Medline Plus, explica que el cerebro está compuesto de cientos de neuronas con funciones que desencadenan capacidades cognitivas como la concentración y la memorización.
“Se piensa que el lado izquierdo del cerebro es más influyente para moldear el razonamiento y el lenguaje, así como las habilidades científicas y matemáticas”, precisa la entidad de salud.
Por tal razón, mantener una dieta balanceada rica en frutas, verduras y alimentos ricos en omega-3 es indispensable para el cerebro y la mejora de sus funciones.
Los ácidos grasos que componen el omega-3 son buenos para el corazón porque tienen la capacidad de reducir los triglicéridos, disminuir la presión arterial alta, combatir el colesterol y contrarrestar la arritmia, asegura la entidad de ciencia y salud americana. “Estas grasas saludables también pueden ayudar con el cáncer, la depresión, la inflamación”, menciona Medline Plus en un informe.
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Por su parte, la National Institutes of Health (NIH) explica que existen tres tipos de ácido de omega-3, que el cuerpo solo obtiene a través de alimentos porque no los produce: el ácido eicosapentaenoico (EPA), el ácido docosahexaenoico (DHA), y el ácido alfa-linolénico (ALA).
Es entonces que el consumo regular de esta grasa puede ser favorable para el organismo porque disminuye el riesgo del desarrollo de varias enfermedades crónicas como el Alzheimer, que de acuerdo con la Clínica Mayo, “es un trastorno neurológico progresivo que hace que el cerebro se encoja y que las neuronas cerebrales mueran”.
Flujo sanguíneo en el cerebro
Una óptima circulación favorece al cerebro mitigando el riesgo de cualquier afección. De acuerdo con el libro ‘The Cerebral Circulation’, escrito por Marilyn J. Cipolla, en su capítulo V señala que el cerebro utiliza por lo menos el 20 % de oxígeno para poder funcionar correctamente, encontrándose altamente relacionado con las arterias para una resistencia vascular.
Por esta y otras razones, el flujo sanguíneo en el cerebro es tan importante porque al llevar nutrientes como la glucosa, favorece a las neuronas, que si no la reciben, pueden no solo dañarse, sino morir.
La American Association of Neurological Surgeons explica que una vez se hayan muerto las neuronas o tengan un deterioro o incluso daño, no pueden repararse, y es allí, en donde se desarrollan las discapacidades cognitivas y físicas.
La enfermedad que más se destaca es la enfermedad cerebrovascular, que tiene factores de riesgo como el consumo de cigarrillo y la falta de ejercicio. No obstante, otros como el colesterol alto, la diabetes y la obesidad no son ajenos a esta afección.
Maneras para mejorar la circulación sanguínea del cerebro
Es entonces que un artículo de Mejor con Salud, escrito por Valeria Sabater, explica que los siguientes hábitos pueden mejorar el flujo de sangre en el cerebro, como:
- Realizar ejercicios mentales: si bien es cierto que las actividades no son solo físicas, sino también mentales, es fundamental realizar continuamente crucigramas, sopas de letras, leer, aprender nuevas cosas, ya que fortalecen las conexiones neuronales, reduciendo el desarrollo de algún tipo de enfermedad que afectan el cerebro.
- Evitar el consumo de tabaco y alcohol: como se nombró anteriormente, tanto el consumo de tabaco como de alcohol son perjudiciales, no solo para el cerebro sino para el organismo, por lo que es importante más que disminuir su consumo, restringirlo. Cabe mencionar que, tanto el cigarrillo como el alcohol son factores de riesgo para el desarrollo de cualquier enfermedad.
- Ejercicios aeróbicos: el Consejo Europeo de Información sobre la Alimentación (EUFIC) precisa que el ejercicio aeróbico es una actividad de resistencia que requiere de muchos músculos. Así lo corrobora Medline Plus, que asegura que este tipo de rutina hace “que el corazón bombee sangre de forma más rápida y con mayor fuerza de lo normal”, misma que procura el bienestar del corazón y el colesterol HDL.