Despiste o pérdida de memoria, ¿cuál es la diferencia?

Muchas personas suelen confundir un despiste con la pérdida de la memoria, que ocasiones comienzan cuando una persona olvida donde dejó las llaves o no poder decir una palabra que está a punto de decir y como se dice “tenerla en la punta de la lengua”.

Los expertos han advertido que, en algunas oportunidades, la pérdida de la memoria puede resultar a una lesión en el cerebro, por lo que llamaron la atención para que se tenga cuidado cuando se evidencian señales de una situación similar.

Coinciden, eso sí, en que en líneas generales se presenta cuando es causada por un tumor cerebral, tratamientos para el cáncer, como radiación al cerebro, trasplante de médula ósea o quimioterapia, conmoción o traumatismo craneal, entre otras.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la pérdida de la memoria es el olvido inusual, en los que una persona no es capaz de recordar hechos nuevos, o acceder a uno o más recuerdos del pasado, o ambos.

Los primeros síntomas de esta enfermedad neurodegenerativa, en ocasiones suelen ser confundidos con esos despistes que se hacen cada vez más frecuentes con la edad, aunque se pueden dar en personas no tan mayores o sanas.

En algunos casos, esta situación se presenta por breve tiempo (de manera transitoria), pero en casos graves no desaparecen, por lo que es importante conocer las causas, ya que puede empeorar con el tiempo e interferir, en las actividades cotidianas de la persona.

Por esa razón, se recomienda que ante esas pequeñas lagunas mentales se debe consultar el médico para tratar de determinar si obedece a, por ejemplo, a envejecimiento, etapa en la que es normal olvidar cosas, e incluso dificultad para aprender cosas nuevas o necesitar más tiempo para recordar.

Sin embargo, el envejecimiento normal no conduce a una pérdida drástica de la memoria, pero de presentarse obedecería a otras razones.

Ante eso es importante reconocer las diferencias entre esas pequeñas lagunas mentales y las manifestaciones iniciales del alzhéimer, con el propósito de iniciar de inmediato el tratamiento adecuado.

Causas

La pérdida de memoria se puede dar por varios factores, algunos de los cuales mencionamos anteriormente, pero a los que se añaden otros.

Insuficiencia de oxígeno al cerebro cuando el corazón o la respiración se detienen durante demasiado tiempo, infección cerebral grave o infección alrededor del cerebro, una cirugía mayor o una grave enfermedad e incluso cirugía de cerebro.

Así mismo, hidrocefalia (acumulación de líquido en el cerebro), esclerosis múltiple, amnesia global transitoria (pérdida súbita y temporal de la memoria) por una causa incierta, accidente insquémico transitorio, AIT, o accidente cerebro vascular y demencia.

Los especialistas han advertido, además, que en algunas ocasiones la pérdida de memoria está acompañada de problemas de salud mental y que se presenta después de un evento traumático o estresante importante, trastorno bipolar, depresión o cualquier otro trastorno mental, como esquizofrenia.

También es un signo de demencia, ya que esta afecta el pensamiento, el lenguaje, la capacidad de discernimiento y la conducta, y que se presenta en los casos de demencia vascular, demencia por cuerpos de Lewy, demencia frontotemporal, parálisis supracuclear progresiva, hidrocefalia normotensiva, enfermedad de Creutzfeldt-Jakob y alzahimer.

Pero existen otros factores que influyen y que tienen que ver con el consumo de alcohol o uso de medicamentos con receta médica o sustancias ilícitas, infecciones del cerebro tales como la enfermedad de Lyme, sífilis o VIH/Sida o los hinópticos.

Así mismo, abuso de medicamentos tales como los barbitúricos o los hinópticos, TEC (terapia electroconvulsiva) (con mucha frecuencia pérdida de memoria a corto plazo), epilepsia, que no ha sido bien controlada, alguna enfermedad que produce pérdida o daño a las neuronas o al tejido cerebral, como Parkinson, Huntington o esclerosis múltiple o bajos niveles de nutrientes o de vitaminas importantes tales como, vitamina B1 o B12.

Señales

Entre las primeras señalas de la pérdida de memoria, que es uno de los primeros o más reconocibles signos de demencia, se encuentran:

- Hacer las mismas preguntas una y otra vez

- Olvidar palabras comunes al hablar

- Mezclar palabras: decir “cama” en lugar de “mesa”, por ejemplo

- Demorarse más en realizar tareas conocidas, como seguir una receta

- Colocar objetos en lugares inapropiados, como por ejemplo, poner una billetera en el cajón de la cocina

- Perderse al caminar o manejar en una zona conocida

- Tener cambios en el estado de ánimo o en el comportamiento sin razón aparente

Cuando alguien presenta estas señales es importante identificar una causa reversible de deterioro de la memoria, con lo cual se garantiza un tratamiento adecuado, ya que se podrían diseñar las estrategias para su atención, como: comenzar tratamientos para controlar los síntomas, educarse así mismo y a los seres queridos sobre la enfermedad.

De la misma manera, determinar las preferencias de cuidados futuros, identificar centros de cuidado u opciones de cuidado en el hogar y resolver asuntos financieros o legales.