Día del Padre: recetas fáciles y creativas para sorprenderlo en su fecha especial

Llegó el tercer domingo del mes y con él, la celebración del Día del Padre, un momento para homenajear a esos seres queridos que han ejercido su paternidad con responsabilidad y amor. En reconocimiento al rol de los papás como orientadores, partícipes de la crianza de los hijos y resaltando la importancia de la figura paterna en los hogares, esta es la ocasión perfecta para darles un detalle.

Son varias las maneras de demostrarles que los queremos y valoramos, algunos prefieren salir a comer, aprovechar el día festivo del sagrado corazón de Jesús para viajar, comprar un obsequio, o tal vez realizar una actividad diferente que los lleve a salir de la rutina.

Para quienes desean que sea un plan familiar, íntimo y especial, recopilamos las tres recetas más creativas y fáciles de hacer para sorprender a papá y quedarse con un recuerdo especial este día.

El chef vitoriano Gorka Barredo, mediante el portal Cocina casera y fácil nos propone dos selecciones de receta que son ideales para deleitar a los padres con algo rico y fácil de hacer.

Cordon bleu de pollo relleno de jamón y queso

Para realizar el cordon bleu de pollo, se requiere lo siguiente:

• 2 pechugas de pollo cortadas en filetes
• 8 lonchas de queso tipo sándwich
• 8 lonchas de jamón york
• Pan rallado, harina y 2 huevos
• Sal y pimienta
• Aceite

Para hacer el cordon bleu de pollo, se deben sazonar las pechugas con sal y pimienta. Luego, se coloca una pechuga entre dos capas de papel film y se aplana con un objeto romo. Después, se añade queso y jamón sobre la pechuga y se enrolla cuidadosamente, asegurándose de que el relleno quede en el interior.

A continuación, se debe empanizar el cordon bleu de pollo. Se pasa cada pechuga primero por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado. Este proceso se repite una vez más para lograr una cobertura crujiente y que mantenga bien el relleno.

Una vez empanizadas todas las pechugas, se recomienda colocarlas en el congelador durante unos 10 minutos antes de freírlas. Si no se van a cocinar de inmediato, se pueden refrigerar durante algunas horas.

Para la cocción, se calienta abundante aceite en una sartén a una temperatura de aproximadamente 150ºC. Se colocan las pechugas en el aceite caliente y se fríen durante unos tres minutos, hasta que estén doradas y cocidas en su interior. Después de la fritura, se retiran del aceite y se colocan sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa antes de servirlas.

Pasta con camarones y salsa cremosa

El portal Que rica vida nos comparte una receta fácil que suele verse muy elegante y elaborada en el plato.

Ingredientes:

• 1 libra de pasta
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• 4 dientes de ajo, finamente picados
• 1 cebolla blanca, finamente picada
• 1 libra de camarones
• 2 cucharadas de pasta de tomate
• 1/4 de taza de vino blanco
• 2 tazas de crema de leche
• 2 cucharadas de cebolla picada
• Sal y pimienta al gusto

En una olla grande, la pasta se cocina en agua hirviendo durante aproximadamente 8 minutos, revolviéndola ocasionalmente para evitar que se pegue.

Mientras la pasta se cocina, en una sartén grande, se calienta el aceite de oliva y se añade el ajo y la cebolla picada. Se sofríe a fuego medio hasta que la cebolla esté transparente. Se agregan los camarones y se saltean hasta que cambien de color de gris a rosado. Luego, se agrega la pasta de tomate y se saltea por 1 minuto más. Se incorpora el vino blanco y se deja que se reduzca.

Se añade la crema de leche a la sartén y se cocina a fuego medio durante 8 minutos adicionales, permitiendo que los sabores se mezclen y la salsa se espese ligeramente. Se asegura de sazonar con sal y pimienta al gusto.

Una vez que la pasta esté cocida al dente, se escurre y se añade a la sartén con la salsa. Se mezcla bien para que la pasta se impregne con la salsa cremosa.

Para endulzar el final de la cena, el portal Directo al paladar recomienda un postre fácil de hacer y con pocos ingredientes:

• Galletas tipo Digestive200 g
• Mantequilla a temperatura ambiente100 g
• Chocolate negro para postres250 g
• Leche entera1 l
• Cuajada en polvo sobres2
• Azúcar50 g
• Chocolate blanco para decorar100 g

Comenzamos triturando las galletas en una bolsa de plástico bien cerrada, utilizando un rodillo para aplastarlas hasta obtener migas finas. A continuación, agregamos la mantequilla a temperatura ambiente o ligeramente derretida y mezclamos a fondo hasta obtener una masa homogénea. Esta mezcla se utiliza para cubrir la base y los laterales de un molde desmoldable de 25 cm, asegurándonos de aplastarla bien para compactarla. Luego, refrigeramos o congelamos el molde para que la base se endurezca.

Mientras tanto, nos ocupamos de preparar el relleno. Picamos el chocolate y lo calentamos junto con la leche, los dos sobres de cuajada y el azúcar en una cacerola durante aproximadamente 10 minutos. Removemos constantemente para evitar la formación de grumos. Una vez que la mezcla esté suave y sin grumos, la vertemos sobre la base de galletas en el molde y la dejamos cuajar en la nevera durante unas cuatro horas. Justo antes de servir, utilizamos un pelador para hacer virutas de chocolate blanco y las usamos como decoración sobre la tarta.