SALUD
Diabetes: ¿cómo evitar subir de peso si se aplica insulina?
La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía.
El aumento de peso es un efecto secundario que se presenta con frecuencia en las personas que requieren aplicarse insulina para mantener regulados sus niveles de azúcar en la sangre y bajo control la diabetes.
La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía. Sin embargo, en muchas oportunidades cuando un paciente sufre de diabetes, es porque esta hormona no funciona como debería.
En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina; mientras que en la tipo 2, la más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre generando afectaciones a diversos órganos del cuerpo.
“Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios. Puede dañar los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional”, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Cuando una persona sufre de diabetes y no tiene suficiente insulina para regular la glucosa, sebe inyectarse esta sustancia con el fin de lograr su objetivo. Sin embargo, con frecuencia, la insulina y el aumento de peso van de la mano, lo que juega precisamente en contra de la diabetes, por lo que se convierte en un círculo vicioso.
Según el instituto de investigación Mayo Clinic, cuando un paciente se aplica insulina, la glucosa puede ingresar a las células, por lo que esta sustancia disminuye en la sangre, que es precisamente el objetivo que se busca con el tratamiento. No obstante, si la persona ingiere más calorías de las que necesita para mantener un peso saludable, las células recibirán más glucosa y lo complejo es que la que no usan se acumula en forma de grasa.
De acuerdo con los expertos, comer alimentos saludables y realizar actividad física la mayoría de los días de la semana puede ayudar a prevenir el aumento de peso no deseado. A esto se pueden sumar algunas recomendaciones planteadas por los especialistas de Mayo Clinic.
- Contar las calorías. Comer y beber menos calorías ayuda a prevenir el aumento de peso cuando se aplica insulina. Uno de los consejos es llenar el refrigerador y la despensa con frutas, verduras y granos integrales. También es importante planificar que cada comida incluya una buena mezcla de almidones, frutas y verduras, proteínas y grasas.
- Reducir el tamaño de las porciones: Evitar comer en exceso y beber agua en lugar de bebidas con alto contenido calórico, es clave.
- No saltarse las comidas. No es buena idea pensar en reducir las calorías saltándose las comidas. Cuando una persona deja de lado una comida, es más probable que elija opciones poco saludables porque tiene demasiada hambre. Saltarte las comidas también puede causar niveles bajos de glucosa en la sangre si no se ajusta la dosis de insulina.
- Realizar actividad física. El ejercicio permite quemar calorías. Una meta razonable para la mayoría de los adultos, establecida por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Institutos Nacionales de Salud, de Estados Unidos, es al menos 150 minutos a la semana de actividad aeróbica moderadamente intensa, como caminar, andar en bicicleta, hacer ejercicios aeróbicos en el agua, bailar o trabajar en el jardín, además de ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos veces a la semana.
- Consultar con el médico sobre otros medicamentos para la diabetes. Algunos medicamentos para la diabetes pueden también promover la pérdida de peso y permitir reducir la dosis de insulina.
- Tomar la insulina según las indicaciones. No es prudente saltarse ni reducir las dosis de insulina para evitar el aumento de peso. Aunque la persona adelgazar si se inyecta menos insulina de la recetada, los riesgos son graves. Si el paciente no recibe suficiente insulina, el nivel de glucosa en la sangre aumentará y también lo hará el riesgo de complicaciones de la diabetes, que puede terminar generando mayores problemas de salud.