Acumular grasa puede traer enfermedades como sufrir de problemas cardíacos y diabetes tipo 2, por esta razón expertos aconsejan hacer ejercicio y llevar una dieta balanceada. Foto: Gettyimages.
La práctica de ejercicio es clave para controlar los niveles de glucosa en la sangre. Foto: Gettyimages. | Foto: Foto Gettyimages

SALUD

Diabetes: la mejor hora del día para bajar el azúcar en la sangre con ejercicio

Los niveles elevados de glucosa en la sangre pueden ocasionar problemas oculares, úlceras e infecciones e inconvenientes cardiovasculares y renales.

2 de noviembre de 2022

Al azúcar en la sangre se le conoce como glucosa. Es una sustancia que proviene principalmente de los alimentos que se consumen y se constituye en la principal fuente de energía del organismo.

“Los azúcares que se ingieren con los alimentos son transformados por el metabolismo en glucosa. Ésta se desplaza a través del torrente sanguíneo hasta alcanzar las células de diferentes tipos de tejido proporcionando la energía que necesitan para funcionar”, precisa la compañía de salud Sanitas, de España.

La insulina es la hormona encargada de controlar los niveles de glucosa en la sangre. Sin embargo, cuando el cuerpo no produce la suficiente cantidad o ésta no ejerce de manera apropiada su trabajo, el azúcar se queda en la sangre generando complicaciones de salud.

Si esta enfermedad no se controla, con el paso de los años puede causar diversos problemas a diferentes órganos del cuerpo, según información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Por ejemplo, es posible que ocasione problemas oculares, úlceras e infecciones en la pierna o el pie y daños de los nervios del cuerpo causando dolor, hormigueo, pérdida de la sensibilidad, problemas para digerir el alimento y disfunción eréctil.

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También genera problemas renales; debilitamiento del sistema inmunológico y aumento de la probabilidad de sufrir un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.

Un estudio realizado por investigadores del Centro Médico de la Universidad de Leiden, Países Bajos, concluyó que hacer ejercicio por la tarde o por la noche se asocia con una menor resistencia a la insulina y, como consecuencia, un mejor control del azúcar en la sangre, en comparación con una distribución uniforme de actividad física a lo largo del día.

La investigación, citada en un artículo del medio digital Urgente24, de Argentina, utilizó datos de 6.671 personas del estudio de Epidemiología de la Obesidad (NEO) de dicho país, el cual se utiliza para investigar los procesos involucrados en el desarrollo de enfermedades relacionadas con la obesidad.

“El equipo utilizó medidas de aceleración y frecuencia cardíaca para estimar el gasto de energía de la actividad física (PAEE, por sus siglas en inglés). En efecto, observaron que una PAEE más alta y, en particular de intensidades elevadas, se asociaron tanto con un contenido reducido de grasa hepática como con una resistencia a la insulina reducida”, precisa la publicación.

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Beneficios del ejercicio

Para obtener los mejores beneficios para la salud, los expertos recomiendan realizar al menos 150 minutos a la semana de actividad física de intensidad moderada, tales como: caminata rápida, natación y montar en bicicleta.

También aconsejan que los niños, incluso aquellos con diabetes tipo 1, realicen al menos 60 minutos de actividad de moderada a vigorosa todos los días.

Si una persona está tomando insulina u otros medicamentos que pueden causar un nivel bajo de azúcar en la sangre es importante practicar una prueba de glucosa de 15 a 30 minutos antes de hacer ejercicio.

Cuando el paciente no consume medicamentos para la diabetes o aquellos que se relacionan normalmente con niveles bajos de azúcar en la sangre, es probable que no requiera tomar ninguna precaución especial antes de hacer ejercicio. Sin embargo, siempre es mejor consultar con el médico para determinar cuál es el plan de actividad física recomendado teniendo en cuenta las condiciones del paciente.