Vida Moderna
Dientes sanos: cómo fortalecer el esmalte y combatir la caries naturalmente
La salud oral es vital para prevenir problemas con los dientes y encías.
El cuidado de los dientes es un tema que inicia desde los primeros años de vida de cada persona, con recomendaciones básicas como cepillarse tres veces al día y evitar los alimentos dulces.
Por supuesto, el cuidado de la salud bucal debe preservarse conforme pasa el tiempo, reduciendo así el riesgo de desarrollar problemas con los dientes y las encías. De acuerdo con MedlinePlus, servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, seguir las siguientes recomendaciones también previene la aparición de caries y la pérdida de los dientes:
- Cepillarse los dientes dos o tres veces al día con una pasta dental con fluoruro.
- Limpiarse entre los dientes todos los días con hilo dental.
- Limitar los alimentos azucarados entre comidas.
- No fumar ni masticar tabaco.
- Visitar regularmente al odontólogo para limpiezas profundas y exámenes de rutina.
El National Institute of Health (NIH) expone en su sitio web que “las encías y los dientes sanos hacen que sea más fácil comer bien y disfrutar de la buena comida”. A su vez, indica que existe una amplia variedad de problemas que pueden afectar la salud oral, no obstante, “un buen cuidado mantendrá los dientes y las encías fuertes a medida que envejece”.
Con respecto a la caries, MedlinePlus explica que se trata del daño en la superficie o esmalte de un diente, el cual ocurre cuando bacterias en la boca fabrican ácido que ataca el esmalte. “Las caries son huecos en el diente. Si no son tratadas, pueden causar dolor, infección e incluso su pérdida”, agrega.
Por su parte, el NIH menciona que “cepillarse los dientes y utilizar hilo dental pueden proteger contra la caries dental, pero una vez que se forma un hueco, un dentista debe repararlo con un relleno o empaste dental para evitar más daños”.
¿Cómo fortalecer el esmalte de los dientes naturalmente?
El cuidado general de los dientes requiere de un trabajo permanente y minucioso. Por ello, el NIH comparte varios consejos para protegerlos. De igual manera, estos hábitos también resultan de gran utilidad para preservar la salud de las encías.
En primer lugar, una limpieza bien hecha disminuye el riesgo de desarrollar problemas bucales en el futuro. Para ello, las personas deben seguir las siguientes recomendaciones:
- Capilar suavemente los diferentes lados de los dientes con un cepillo de cerdas suaves y una pasta dental con flúor. El cepillo debe ser reemplazado cada tres a cuatro meses.
- Usar pequeños movimientos circulares, así como movimientos cortos hacia adelante y hacia atrás durante el cepillado.
- Cepillar cuidadosamente, con movimientos suaves, a largo de la línea de las encías.
- Cepillar ligeramente la lengua o utilizar un raspador de lengua para ayudar a mantener la boca limpia.
- Limpiar entre los dientes con hilo dental. Este hábito elimina la placa y los restos de comida que un cepillo de dientes no puede alcanzar.
- Enjuagarse la boca después de emplear el hilo dental.
La limpieza de los dientes debe realizarse con una pasta que contenga flúor, pues este compuesto “fortalece el esmalte y ayuda a reparar las primeras etapas de la caries dental”, menciona el portal web de la Clínica Dental Adeslas.
De igual manera, el flúor contribuye a que los dientes sean más resistentes a los ácidos que provienen de los alimentos y de las bacterias.
Otro cuidado que ayuda a proteger la integridad del esmalte en los dientes es evitar el bruxismo, es decir, la práctica de apretar o rechinar los dientes continuamente. El riesgo radica en que, con el tiempo, puede llevar a que el esmalte se desgaste.
En casos en que la caries ya está avanzada, los síntomas subsecuentes incluyen dolor de dientes, sensibilidad a los dulces, calientes o fríos, manchas blancas o marrones en la superficie de un diente, la aparición de un hueco en diente e incluso el desarrollo de infecciones. De ser el caso, el paso a seguir debe ser la consulta médica para obtener un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado.