SALUD
Diez recomendaciones para prevenir enfermedades del corazón
Los principales factores de riesgo para sufrir enfermedades cardíacas son la edad, el sexo, la raza y la historia familiar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define las enfermedades cardiovasculares (ECV) como un grupo de desórdenes del corazón y de los vasos sanguíneos, que incluyen diversos tipos de cardiopatías.
Una de las principales causas detrás de las afecciones de este órgano es la aterosclerosis, la cual se presenta cuando la grasa y el colesterol se acumulan en las paredes de las arterias, formando placas que con el tiempo estrechan los vasos sanguíneos y causan problemas en todo el cuerpo.
“Si una arteria resulta obstruida, esto puede llevar a que se presente un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular”, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
En la lista de enfermedades cardiovasculares está la cardiopatía coronaria, las enfermedades cerebrovasculares y las arteriopatías periféricas. También la cardiopatía reumática, la congénita, que está relacionada con malformaciones del corazón presentes desde el nacimiento, y las trombosis venosas profundas y embolias pulmonares, según explica la OMS.
Tendencias
Los principales factores de riesgo para sufrir enfermedades del corazón son la edad, el sexo, la raza y la historia familiar. La Biblioteca de Medicina asegura que el riesgo aumenta a medida que las personas envejecen. Los hombres de 45 años o más y las mujeres de 55 años en adelante son más propensas.
Los especialistas plantean una serie de recomendaciones que ayudan a prevenir el desarrollo de enfermedades cardíacas y son las siguientes.
1. Controlar la presión arterial: La hipertensión es un importante factor de riesgo para las enfermedades del corazón. Una de las mejores formas de controlar la presión arterial es adoptando hábitos de vida saludables.
2. Mantener bajo control el colesterol y los triglicéridos: Los niveles elevados de colesterol pueden obstruir las arterias y aumentar su riesgo de enfermedad coronaria y ataque al corazón. Cambios en el estilo de vida y medicamentos pueden bajar esta sustancia. Los triglicéridos son otro tipo de grasa en la sangre y si se suben también afectan la salud del corazón.
3. Mantener un peso saludable: Tener sobrepeso u obesidad está asociado a otros factores de riesgo de enfermedad del corazón, incluyendo el colesterol y los triglicéridos altos, presión arterial alta y diabetes.
4. Dieta saludable: Es importante limitar las grasas saturadas, los alimentos ricos en sodio y azúcares agregados e ingerir mucha fruta fresca, verduras y granos enteros.
5. Hacer ejercicio: La actividad física tiene muchos beneficios, fortalece el corazón y mejora la circulación. También ayuda a mantener un peso saludable y bajar el colesterol y la presión arterial.
6. Limitar el alcohol: Beber demasiado alcohol genera el riesgo de aumentar la presión arterial y añadir calorías que derivan en aumento de peso. Ambos incrementan el riesgo de enfermedades del corazón. Los hombres no deben consumir más de dos bebidas alcohólicas al día, y las mujeres, una.
7. No fumar: Fumar cigarrillos eleva la presión arterial y pone a la persona en mayor riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular. La recomendación es que si un individuo fuma deje de hacerlo y así disminuirá su riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca.
8. Controlar el estrés: El estrés está vinculado a las enfermedades del corazón de varias maneras. Puede aumentar la presión arterial y ser un “desencadenante” de un ataque al corazón. Además, algunas formas comunes de hacer frente al estrés, como comer en exceso, beber mucho y fumar, son dañinas para este órgano.
9. Controlar la diabetes: Tener diabetes duplica el riesgo de enfermedad cardíaca diabética. Esto se debe a que, con el tiempo, el alto nivel de azúcar en la sangre puede dañar los vasos sanguíneos y los nervios que controlan el corazón y las arterias.
10. Dormir lo suficiente: Si no se duerme lo suficiente, se aumenta el riesgo de hipertensión, obesidad y diabetes. Estas tres afecciones aumentan la posibilidad de desarrollar enfermedades del corazón. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño por noche.