Vida Moderna

Dolor abdominal, heces de color claro y fatiga, podrían ser síntomas de este tipo de cáncer silencioso

Tener un plan de alimentación adecuado reduce las probabilidades del desarrollo de ciertas afecciones.

17 de enero de 2023
Getty Creativo
Es improtante prestar atención a cualquier síntoma. | Foto: Getty Images/iStockphoto

De acuerdo con la Organización Mundial para la Salud (OMS) el cáncer es una causa principal de muerte, que en el 2020 cobró la vida cerca de casi 10 millones de personas alrededor del mundo.

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) esta enfermedad cancerígena inicia en las células del páncreas, un órgano importante para la digestión y la producción de insulina.

Sin embargo, la entidad aclara que los tumores que se desarrollan en el páncreas pueden ser benignos o no, siendo una enfermedad que usualmente no es descubierta en su etapa inicial.

Los síntomas principales del cáncer pancreático son dolor abdominal, fatiga, heces de color claro, sangrado, pérdida de apetito inexplicable, entre otros. No obstante, es importante mencionar que existen otras clases de cáncer de páncreas como el adenocarcinoma pancreático y el cáncer ampular, asegura la American Cancer Society.

Vista de cerca del sistema digestivo humano. Hígado, estómago y páncreas. Ilustración 3d
Doto referencia sobre sistema digestivo. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Factores de riesgo de cáncer de páncreas

Si bien es cierto que en la mayoría de cánceres, algunos factores de riesgo suelen ser los mismos, en otros no necesariamente, porque según lo explica la Sociedad Americana contra el Cáncer, la edad o los antecedentes familiares no cambian.

Es entonces que para que incrementen las posibilidades del desarrollo de cáncer de páncreas se encuentran relacionados:

  • El consumo de tabaco: este hábito malsano es más frecuente de lo que parece. Según la entidad estadounidense se relacionan un 25 % de probabilidades para el desarrollo de cáncer pancreático en cualquier fumador activo, incluso asegura que es el doble de riesgoso.
  • Ingesta de alcohol: el consumo de bebidas alcohólicas es un factor de riesgo para el desarrollo de muchas enfermedades; sin embargo, la pancreatitis induce al desarrollo de cáncer, pero “a menudo afecta a personas que consumen mucho alcohol o tabaco”, menciona la entidad americana. Por esto, las instituciones de salud instan a los ciudadanos a dejar de fumar y evitar el consumo de alcohol.
Alcohol
El consumo de bebidas embriagantes es perjudicial para la salud. Getty Images. | Foto: Getty Images/iStockphoto
  • Edad: las personas mayores de 45 años suelen ser diagnosticadas, pero una edad promedio también se extiende hasta los 65 años de edad.
  • Alimentación: años atrás la OMS alertó sobre el vínculo que tiene el cáncer colorrectal con el consumo de carne roja, a esto se suma la American Cancer Society que dice que también este alimento en grandes cantidades puede desarrollar cáncer de páncreas.
El consumo excesivo de carnes rojas puede provocar diferentes tipos de cáncer.
El consumo excesivo de carnes rojas puede provocar diferentes tipos de cáncer. | Foto: Getty Images
  • Pacientes con diagnóstico de diabetes: es entonces que los pacientes con diabetes tipo 2 suelen desarrollar este cáncer, siendo los niños y los jóvenes los más afectados actualmente. Esto no quiere decir que los adultos estén exentos. Cabe recordar que, según la OMS, “la diabetes es una causa importante de ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y amputación de los miembros inferiores”.

Además, es una enfermedad crónica que se caracteriza porque el organismo no regula los niveles de azúcar en la sangre. Existen dos clases de diabetes, el tipo I y el tipo II:

  • El tipo I: en esta clase de diabetes el páncreas no produce insulina, por esto, la glucosa se acumula en la sangre.
  • El tipo II: de acuerdo con MedlinePlus, en esta clase de diabetes, los niveles de glucosa en la sangre son altos, que inicia con la resistencia de las células a la insulina.

En conclusión, para reducir el desarrollo de este tipo de cáncer es importante tener una rutina física, un plan de alimentación adecuado, restringir el consumo de cigarrillo, y siempre consultar con un profesional de la salud.