SALUD
Dolor de espalda crónico: las recomendaciones de expertos para aliviarlo
Enfermedades como la artrosis lumbar y escoliosis pueden ser causales.
El dolor de espalda es una de las afecciones más comunes por las que las personas acuden al médico o faltan al trabajo, y también es una de las causas principales de discapacidad en el mundo, según el instituto Mayo Clinic.
Este padecimiento varía desde un dolor muscular hasta una sensación de ardor o dolor muy agudo o punzante. Además, puede propagarse por la pierna o empeorar cuando la persona se inclina, gira, se levanta o camina.
Son diversas las razones por las cuales se presenta esta afección, pero en muchas oportunidades están relacionadas con el desarrollo de enfermedades. Información del portal Medicina del dolor, de España, indica que algunos de los padecimientos que ocasionan esta molestia crónica son, entre otros, la artrosis lumbar, espondilolistesis, escoliosis y artritis.
En el caso de la artrosis lumbar se produce cuando el cartílago de los discos de la zona lumbar se adelgazan por el desgaste. Normalmente, se presenta con inflamación, inestabilidad, dolor irradiado hacia los glúteos y piernas y espasmos musculares.
Lo más leído
El dolor crónico en la espalda también puede ser por espondilolistesis, una enfermedad que se evidencia cuando se desplaza una vértebra de la parte inferior de la espalda sobre otra, lo que causa una inestabilidad o hace que se comprima una raíz nerviosa. Los signos son dolor en la espalda baja, tensión muscular, entumecimiento, rigidez, sensibilidad y debilidad en las piernas.
La escoliosis, por su parte, se presenta por una curvatura lateral de la columna vertebral que ocurre con mayor frecuencia durante el período de crecimiento antes de la pubertad. La escoliosis grave puede ser muy incapacitante, precisa la mencionada fuente.
Otra enfermedad que genera dolor crónico en la espalda es la artritis, que se manifiesta en cualquier parte, a pesar de que la zona lumbar es especialmente vulnerable debido a que soporta más peso corporal. Esta afección produce hinchazón, dolor, sensibilidad al tacto y rigidez que limita completamente el movimiento. El resultado de esta artritis es la deformación de la articulación.
Recomendaciones
Dado que se trata de afecciones que normalmente son crónicas, es importante tomar algunas acciones tendientes a minimizar el dolor con el fin de tener una mejor calidad de vida.
Información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos indica que el manejo del dolor de espalda crónico significa encontrar maneras de hacerlo tolerable. Es posible que una persona no pueda librarse completamente de su molestia, pero sí cambiar algunas cosas que lo empeoran, las cuales se denominan factores estresantes y que son físicos y emocionales.
Una de las recomendaciones de los expertos para aliviar el dolor es controlar el estrés, pues esto mejora la salud física y emocional. Los especialistas de esta institución aseguran que lo primero es identificar lo que hace que el dolor mejore y empeore y a partir de allí se pueden realizar cambios en el hogar y el trabajo para disminuir las causas.
Por ejemplo, si la molestia es peor en el trabajo, es posible que el puesto no esté organizado correctamente. El paciente debe asegurarse de que la silla tenga espaldar recto y ajustable, con apoyabrazos y un asiento giratorio. También es importante evitar permanecer de pie durante largo tiempo. Si se tiene que mantener esta posición por el trabajo, la recomendación es ensayar descansando un pie sobre una silla, luego el otro.
Hábitos de vida
También es clave establecer hábitos de vida sanos y rutinas que permitan tener un manejo del dolor. Estos son algunos de ellos:
- Realizar un poco de ejercicio todos los días. Caminar es una buena manera de mitigar las molestias. Si es difícil hacerlo, lo recomendable es recurrir a un fisioterapeuta para desarrollar un plan de ejercicios que se puedan practicar dependiendo de la condición.
- Comer alimentos bajos en grasas y azúcar. Los alimentos saludables hacen que el cuerpo se sienta mejor y disminuyen el riesgo de tener sobrepeso.
- Reducir las exigencias sobre el tiempo. Aprender a decir sí a las cosas que sean importantes y no a aquellas que no lo sean.
- Tomarse los medicamentos según sea necesario.
- Tomar tiempo para actividades que le hagan sentir relajado y tranquilo.
- Tomar tiempo extra para hacer las cosas o ir a donde se requiera hacerlo.
- Hacer cosas que hagan reír. Esta es una terapia para ayudar a reducir el estrés.