Dolor de rodilla: así se puede usar el limón para aliviar la molestias

La rodilla es una de las articulaciones que tiene un mayor riesgo de desarrollar enfermedades o presentar lesiones, ya sea por enfermedades inflamatorias o degenerativas, o porque se presentan lesiones traumáticas o deportivas.

Este padecimiento puede afectar a personas de cualquier edad. y ser resultado de una lesión, como una ruptura de ligamento o un desgarro de cartílago. Algunas afecciones médicas, como la artritis, la gota y las infecciones también pueden provocar dolor de rodilla, indica el instituto de investigaciones clínicas Mayo Clinic.

La ubicación e intensidad del dolor de rodilla varía según la causa del problema. Los signos más frecuentes son enrojecimiento y temperatura al tacto, debilidad o inestabilidad, sonidos de chasquidos o crujidos e incapacidad de enderezar completamente la rodilla.

Los especialistas indican que una lesión en la rodilla puede afectar a cualquiera de los ligamentos, tendones o sacos llenos de líquido (bolsas sinoviales) que rodean la articulación de la rodilla, así como a los huesos, cartílagos y ligamentos que forman la articulación en sí.

Algunas de las lesiones de rodilla más frecuentes son la lesión del ligamento cruzado anterior, fracturas, desgarro de menisco, bursitis de la rodilla y tendinitis, precisa la biblioteca médica MedlinePlus.

Si bien en muchas ocasiones se requiere visitar al médico y realizar terapia para ayudar a subsanar las molestias generadas por este malestar, también se puede recurrir a remedios caseros como el limón que pueden ayudar a aliviar el padecimiento, sin que esto sustituya posibles medicamentos o tratamiento especializado.

Esta fruta cítrica es reconocida por sus bondades culinarias y cosméticas, pero también medicinales. Tiene un alto contenido de vitamina C, así como compuestos antioxidantes, minerales y aceites esenciales.

Además, hace parte del grupo de alimentos alcalinos y se le atribuyen poderes diuréticos y desintoxicantes, según información del portal Mejor con Salud.

El limón es rico en flavonoides, vitaminas A, C y E, y además contiene ácido cítrico. La vitamina C tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, afirma un estudio realizado por la Universidade Federal do Rio de Janeiro, en Brasil, y ayuda a mantener el colágeno del cuerpo. Por su parte, el ácido cítrico posee bondades diuréticas y depurativas.

Sin embargo, a pesar de ser tan utilizado, la mayoría de personas suele desperdiciar una de las partes que más propiedades tiene. Se trata de la cáscara que podría tener 10 veces más vitamina C que la pulpa, además de sustancias antiinflamatorias que podrían aliviar las dolencias generadas en las articulaciones.

Para preparar un remedio casero con limón para aliviar el dolor de rodilla se requiere de una taza de aceite de oliva, dos limones, cinco hojas de eucalipto, un frasco con tapa y vendas. Primero, se debe pelar el limón; después, picar la cáscara y colocarla en el frasco; posteriormente, se agrega el aceite de oliva y las hojas de eucalipto, indica información del portal Panorama Web, de México.

Se cierra el frasco y se guarda la mezcla en un lugar oscuro durante una semana. Pasado este tiempo, se coloca un poco del remedio en una gasa limpia y se ubica sobre la zona dolorida. Se cubre la gasa con una bufanda de lana. Lo ideal es aplicarse este remedio en horas de la noche, para que este ungüento de cáscaras de limón actúe mientras la persona duerme.

Té de limón

Otra de las formas de aprovechar el limón es tomando esta fruta en forma de té. Se utiliza un litro de agua, dos limones y miel si se quiere endulzar.

Para prepararlo se vierte el agua en una olla y se agrega la cáscara de los limones. Se deja hervir durante 15 minutos y se retira del fuego. Luego se adiciona el jugo de limón y se endulza con miel al gusto. Se puede tomar caliente.

Si bien este puede ser un remedio natural que ayude con las molestias en la rodilla, lo mejor siempre es consultar al médico, pues puede presentar interacciones con algunos medicamentos. Adicionalmente, siempre es importante tener presente que los remedios deben ser vistos como un suplemento al tratamiento médico y nunca como un sustituto de este.