¿Durante cuántos días puede usar el mismo tapabocas, según su tipo?

El uso del tapabocas es obligatorio con el fin de mitigar la propagación del coronavirus. Sin embargo, existen diferentes tipos de tapabocas y cada uno tiene recomendaciones de higiene que son importantes para ayudar a disminuir la propagación del virus y ayudar a las personas que no saben que tienen el virus a no transmitirlo a otros.

Por tal razón, las entidades de salud, como el Ministerio de Salud de Colombia y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) han realizado algunas recomendaciones sobre los tapabocas, como por ejemplo, cuál elegir, cada cuánto lavarlo o cómo guardarlo.

En el caso de cuál elegir, los CDC recomiendan que los tapabocas tengan dos o más capas de tela lavable y respirable, que cubran completamente la nariz y la boca, y que se ajusten con precisión a los lados de la cara, sin huecos y que tengan una varilla nasal para evitar que el aire se filtre por la parte superior de la mascarilla.

Sobre la misma línea no recomiendan los tapabocas que estén hechos de una tela que dificulta la respiración, como vinilo y tampoco los que tienen válvulas de exhalación o ventilación que permitan el paso de partículas del virus.

Para los menores de dos años es importante señalar que no deben usar tapabocas, pero en los mayores de dicha edad hay que buscar un tapabocas que esté hecho para niños, para ayudar a garantizar un buen ajuste.

Hay que señalar que los centros explicaron en su página web que usar tapabocas no aumenta el nivel de dióxido de carbono (CO2) del aire que se respira.

Asimismo, explicaron que para usar los tapabocas de de manera correcta y sistemáticamente para mayor protección hay que lavarse las manos o usar desinfectante de manos antes de colocarse la protección.

Además, es importante señalar que no se debe tocar el tapabocas cuando se tiene puesto y este se debe manipular desde la cuerdas o tirillas de soporte y no desde la superficie del mismo.

De igual forma, explicaron que la forma correcta de usarlo es cubriendo nariz y boca y que este se ajuste bien debajo del mentón.

Por su parte, sobre cada cuánto lavarlo es importante resaltar que los tapabocas reutilizables se deben lavar cada vez que se ensucien o al menos diariamente, pero si tiene un tapabocas desechable, bótelo luego de haberlo usado una vez.

“Siempre lávese las manos luego de manipular o tocar un tapabocas usado”, señalan los CDC.

En el caso de los tapabocas reutilizables, se pueden lavar en la lavadora con el resto de las prendas y se puede seguir usando el detergente común para ropa. No obstante, también puede realizar el lavado a mano con un jabón para ropa.

Respecto al secado, puede secar el tapabocas en la secadora, si la tiene, o puede colgarlo al sol hasta que se seque totalmente. Si no puede colgarlo directamente al sol, cuélguelo o apóyelo de forma plana y déjelo secar por completo.

Además, los centros explicaron que si el tapabocas se humedeció o ensució con sudor, saliva, maquillaje u otros líquidos o sustancias, hay que guardarlo en una bolsa plástica sellada hasta que pueda lavarse.

“Lave los tapabocas húmedos o sucios lo antes posible para evitar la proliferación de moho. Los tapabocas húmedos dificultan la respiración y son menos eficaces que los tapabocas secos”, añadieron los CDC.

Sin embargo, si el tapabocas está limpio, este puede guardarse en en una bolsa de papel o de tela de malla. “Si se quitará la mascarilla para comer o beber fuera de su hogar, puede colocarla en algún lugar seguro para mantenerla limpia, como su bolsillo, cartera o bolsa de papel”, explican los centros.

¿Dónde y quiénes deben usar el tapabocas?

1. En el sistema de transporte público (buses, TransMilenio, taxis) y áreas donde haya afluencia masiva de personas (plazas de mercado, supermercados, bancos, farmacias, entre otros).

2. Personas con sintomatología respiratoria.

3. Grupos de riesgo (personas adultas mayores de 70 años, personas con enfermedades cardiovasculares, enfermedades que comprometan su sistema inmunológico, cáncer, VIH, gestantes y enfermedades respiratorias crónicas).