Vida Moderna
El alimento que ayuda a combatir problemas digestivos, bajar de peso y reducir el colesterol
Una persona con intestino sano debe evacuar por lo menos una vez al día, para conseguirlo es necesario consumir alimentos ricos en fibra.
La salud del intestino es determinante para el intestino, esta puede afectar no solo el sistema digestivo, también el inmunitario. La microbiota o flora, conformada por millones de células microbianas, juega un papel fundamental en ello.
El microbioma intestinal es considerado uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta para la buena salud y el bienestar general, debido a que ayuda a digerir los alimentos que consumimos para proporcionar energía al cuerpo y absorbe los nutrientes para mantener la salud de todo el cuerpo.
Algunas investigaciones en curso incluso sugieren que el estado del microbioma intestinal está relacionado con el desarrollo de enfermedades crónicas. Las enfermedades metabólicas, los trastornos gastrointestinales, ciertos tipos de cáncer e incluso la salud e inmunidad del cerebro pueden verse afectadas por la salud digestiva o intestinal.
Algunos alimentos recomendados para combatir problemas digestivos, bajar de peso y reducir el colesterol son:
Miel
Este producto de la naturaleza favorece la función intestinal, gracias a que se compone de azúcares como la levulosa y la dextrosa, que ayudan a generar energía y son fáciles de digerir. Las personas pueden beber un vaso de agua tibia con miel al acostarse y al levantarse.
Avena
Este alimento es rico en carbohidratos, vitaminas, minerales y fibra, por lo que es de gran utilidad para combatir problemas digestivos, el sobrepeso y los altos niveles de colesterol. Puede comerse como cereal, como complemento en una ensalada de frutas y en licuados.
Salvado
La cubierta exterior del grano presenta un elevado contenido de fibra insoluble con propiedades laxantes que combaten las hemorroides y el estreñimiento, al favorecer el tránsito intestinal y disminuir la presión abdominal. Puede incluirse en licuados, en yogur o en la elaboración de postres caseros.
Linaza
Este es un buen laxante y antiinflamatorio. Para consumirlo, debe remojar las semillas en un vaso de agua y déjalas reposar por 12 horas; agregar un poco de miel o limón, y tomarla antes de acostarte.
Probióticos
Cuando se habla de alimentos saludables para el intestino siempre se mencionan los probióticos, haciendo referencia a aquellos que tienen microorganismos vivos que son beneficiosos para el intestino y que normalmente han sido expuestos a un proceso de fermentación. Entre estos se encunetran diferentes productos como:
-Los yogures, al estar fermentados, cuentan con bacterias que pueden ayudar al tracto digestivo y mejorar la digestión. También se ha demostrado que pueden contribuir a mejorar la sensación de hinchazón, la diarrea y la digestión de la lactosa.
-El kéfir, muy similar al yogur, también cumple con dicha premisa, aunque este se elabora con la mezcla de levadura, bacterias y leche. Estudios científicos han relacionado su consumo con un aumento de las bacterias saludables de los intestinos y un descenso de las nocivas. Además, han determinado que puede contribuir a disminuir la inflamación en dicho órgano.
Entre otros probióticos se encuentra el chucrut alemán, realizado con col blanca; el kimchi coreano, que son verduras fermentadas con un sabroso punto picante, el tempeh, que se elabora con soja y es como una carne vegetariana, o el miso, una pasta muy común en China y Japón que se hace con soja, sal y hongo kuji y se emplea para hacer saludables sopas.
Frutas y verduras
La fibra es buena para la salud del intestino y del sistema digestivo en general. Es por ello que los expertos en salud y nutrición siempre recomiendan que no falten frutas y verduras en la dieta. Son estos alimentos los que tienen un gran aporte de fibra, la cual permite que el citado órgano absorba mejor los nutrientes.
Entre las frutas y verduras beneficiosas para el intestino destacan las manzanas. Estas además de aportar fibra son una gran fuente de pectina, que por su capacidad para absorber el agua contribuye a acabar con el estreñimiento y a combatir la diarrea, así como a disminuir el riesgo de sufrir infecciones intestinales e inflamaciones en el colón.