salud mental
El autismo: más común de lo pensado, según estudio de la universidad de Cambridge.
La investigación mostró que muchos niños caen en alguna categoría del espectro y que algunas razas son más proclives a serlo.
Un trabajo realizado por científicos de la Universidad de Cambridge en Reino Unido encontró que uno de cada 57 niños en Inglaterra tiene este diagnóstico. La muestra se hizo con un total de 7 millones menores de edad. Lo que indica que 1.76 por ciento se encuentran en algún lugar del espectro,
Aunque se trata de un estudio inglés, los resultados podrían extrapolarse a otros países, en donde también el número de personas en el espectro autista podría ser mayor. Anteriormente se creía que la prevalencia era de 1 en cada 64 niños (1.57 por ciento). Todo parece apuntara a que las mejores pruebas están detrás del aumento de casos pues antes muchos de estos pasaban sin diagnóstico preciso y por tanto no se contaban de manera oficial.
Los investigadores, que publicaron su trabajo en la revista JAMA pediatrics, además encontraron una mayor prevalencia de casos entre alumnos chinos y de raza negra, con 26 por ciento y 38 por ciento de tener autismo, respectivamente. Los estudiantes con autismo en las escuelas son 60 por ciento más proclives a ser de estratos menos favorecidos y a no hablar inglés. El trabajo también mostró que los niños tienen mayor prevelencia que las niñas y que en 18.1 por ciento presentan problemas de aprendizaje.
El autismo es una discapacidad compleja que aparece en los primeros años de la niñez e impacta las habilidades sociales del individuo, la comunicación y las relaciones interpersonales, según la Sociedad de Autismo de Estados Unidos. Los expertos dicen que esta condición sucede en un espectro porque los comportamientos que la caracterizan afectan de manera diferente a cada paciente.
El autor principal del estudio señaló que su estudio, el primero que mira el tema a través de diferentes razas, q que el trastorno es más común de lo que parecía. “Además encontramos variaciones en autismo, según las minorías de un país, aunque no sabemos por qué sucede”, señaló. Esto quiere decir que se necesita no solo un diagnóstico diferenciado sino también un tratamiento que vaya acorde con cada caso.
Aun no se sabe que causa el autismo, pero sí es importante que la persona reciba un diagnóstico temprano para que el niño reciba el soporte que necesita y así pueda llevar una vida satisfactoria y de calidad.
Según el DSM-V algunos síntomas del autismo son: persistentes diferencias en comunicación, relaciones personas y interacción social del niño en diferentes ambientes. Los padres deben observar patrones de lenguaje atípicos o no hablar. Tener problema para entender la comunicación no verbal y dificultad para mantener conversaciones y amigos.
Esto puede verse en sonidos y frases repetitivos sonidos y frases. Movimientos repetitivos, dificultad para cambiar de rutina, entre otros comportamientos.
Otros indicios que pueden indicar autistmo en un niño son:
Habla más tarde de lo habitual o no habla en absoluto
Repite el lenguaje o el movimiento. Por ejemplo, repetir la misma palabra o sonidos, aletear con las manos o cualquier movimiento repetido.
Tiene una comunicación no verbal atípica, que incluye evitar el contacto visual, dar pocas expresiones faciales o tener un tono monótono.
Prefiere el juego solitario o paralelo en lugar de participar en juegos asociativos o cooperativos con otros niños.
Se encuentra extremadamente angustiado por los cambios, incluidos los nuevos alimentos o los cambios de horario.
Preferencia por el juego estructurado y predecible sobre el juego espontáneo o imaginario.
Interés fuerte y persistente en un tema específico, parte de un juguete o artículo
Según el Manual de estadística y diagnóstico de la American Psychiatric Association, que se usa para dignosticar el autismo, estos comportamientos se pueden presentar muy temprano en la niñez, pero también pueden pasar desapercibidos porque la persona tiene mecanismos para lidiar con su deficiencia. En estas circunstancias podrían manifestarse ampliamente hasta que la persona esté expuesta a las demandas sociales. Es importante detectarlo cuanto antes pues mientras más temprano actúe la familia con su hijo, muchísimo mejor.