Vida moderna
El extraño padecimiento que genera miedo a envejecer
La percepción negativa del envejecimiento puede aumentar el riesgo de depresión y estrés.
Por lo general, una de las fobias más comunes de la humanidad es el miedo a envejecer; sin embargo, eso es relativamente normal, ya que la mayoría de las personas sienten algo de miedo sobre hacerse mayores (o dejar de ser jóvenes), pero esto es una parte inevitable de la vida y lo mejor que se puede hacer es aprender a lidiar con ello, para llevarlo de la mejor forma posible.
El problema es que, cuando las personas sufren de gerascofobia (o fobia a envejecer), los niveles de miedo y ansiedad se vuelven muy altos, en especial cada vez que el tema aparece, y esto puede traer consecuencias negativas tanto para la salud física y como para la salud mental.
Según Livestrong y el psicólogo experto Juhee Jhalani, hay una serie de señales a las que se debe estar atento, pero también algunas cosas que se pueden hacer para mantener la fobia bajo control y evitar que cause algún tipo de daño.
Cabe resaltar que seguramente las personas que lo padecen nunca van a estar completamente tranquilas con la idea de hacerse viejas. No obstante, la Universidad de Harvard dice que hay formas de que el proceso sea más lento, y que tampoco se tiene que estar sufriendo por eso todo el tiempo.
Entre los síntomas se puede sentir como un ataque de ansiedad o de pánico persistente, lo que significa que se experimentan cosas como: palpitaciones cardiacas, nervios, dificultad para respirar, sudoración en exceso, escalofríos, dolor de cuerpo y problemas de digestión.
Además, esto puede llevar también a abusar de los tratamientos y productos anti-edad (que además son bastante caros), y a evitar todas esas actividades que se creen que hacen envejecer más rápido, incluso cuando se disfrutan (como tomar el sol en la playa).
¿Qué causa la fobia a envejecer?
Los expertos no están seguros del origen de esto, no se sabe si hay algún componente genético, o si es algo que se aprende y adquiere con el paso del tiempo, pero, sea lo que sea, esto puede reducir el nivel de felicidad y satisfacción.
Cosas como los mensajes negativos sobre el envejecimiento en los medios, los prejuicios relacionados con la edad, los cumpleaños y las experiencias que cada uno tiene con personas mayores pueden empeorar mucho más el problema. Además, esto se puede presentar en todo tipo de personas, incluso niños y adolescentes.
¿Cómo afecta la salud física y mental?
En primer lugar, los estudios e investigaciones han demostrado que la percepción negativa del envejecimiento puede aumentar el riesgo de depresión y estrés, además de que provoca insatisfacción corporal y afecta la autoestima negativamente. También puede afectar la vida social y llevar al aislamiento, por miedo a que los demás le vean y le juzguen.
Además, el tema del aislamiento es especialmente importante, ya que se ha demostrado que todo ser humano necesita tener contacto con amigos y familia, y mantenerse activo socialmente, para tener una buena salud mental y evitar el deterioro cognitivo.
En cuanto a la salud física, los expertos dicen que tener una mala imagen corporal puede llevar a desarrollar hábitos poco saludables, incluyendo desórdenes alimenticios. Según la Royal Society of Public Health, las personas, incluso, pueden reducir 7 años y medio de su tiempo de vida.
Aquí algunos tips de Harvard para mejorar esta particular fobia:
- Enfocarse en la sabiduría: o en todo lo que ha ido aprendiendo con el paso de los años.
- Cambiar la perspectiva sobre el envejecimiento: agradecer cada año que cumple y reconocer que no todos llegan a hacerlo.
- El valor de las experiencias: recordar los buenos momentos, lo que ya se vivió y lo que falta, enfocarse en lo que cada experiencia ha dado y en las relaciones que se han construido.
- Convertir la salud en prioridad: si las personas quieren envejecer bien, necesitan cuidar su cuerpo y su mente, así que se deben desarrollar hábitos saludables.
- Buscar apoyo: rodearse de personas con una perspectiva mejor y que puedan ayudar a lidiar mejor con la situación.
- Probar cosas nuevas: salir de la rutina es de las mejores cosas que se pueden hacer para sentirse joven.
- Cuidar la piel: sin exagerar, pero usar productos que ayuden a sentirse y verse mejor, usar protector solar y un humectante todos los días para evitar el envejecimiento prematuro.
- Busca un “Role model”: buscar un ejemplo a seguir, de preferencia alguien mayor que demuestre que envejecer no es un castigo o algo malo.
- Busca a un profesional: a veces, solo un terapeuta puede ayudar de la forma que se necesita, así que es buena idea buscar uno con el que se pueda conversar.