Vida Moderna
El fruto seco que alivia el estreñimiento y reduce los niveles de colesterol
Las nueces, las avellanas, las semillas de girasol y las almendras hacen parte del grupo de los frutos secos.
El estreñimiento es una afección en la cual la persona podría tener menos de tres evacuaciones a la semana, de acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés), que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos.
Según el mismo instituto, con esta afección también se pueden presentar heces duras, secas o grumosas, dificultad o dolor para evacuar y sensación de que la evacuación no fue completa.
La distensión abdominal, el dolor en la zona del abdomen o la necesidad de tener que hacer un esfuerzo cuando se intenta ir al baño son otros de los signos y síntomas más comunes del estreñimiento. Lo ideal y recomendable es siempre acudir a un médico para obtener una visión más acertada.
Por su parte, el colesterol es una sustancia cerosa y parecida a la grasa que se encuentra en todas las células del cuerpo que es necesaria para producir hormonas, vitamina D y sustancias que ayuden a digerir los alimentos, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
No obstante, tener altos niveles de colesterol puede aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca, ya que, es posible que se formen depósitos grasos en los vasos sanguíneos que con el tiempo crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias.
Además, a veces, esos depósitos pueden romperse de repente y formar un coágulo que causa un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Son varios los alimentos que ayudan a aliviar el estreñimiento y disminuyen los niveles altos de colesterol. Uno de estos es un fruto seco y son las avellanas, las cuales, según el portal Hazelnut, “son una buena fuente de fibra dietética. Comer mucha fibra estimula las deposiciones regulares y ayuda a prevenir el estreñimiento”.
Asimismo, la misma plataforma señala que “comer avellanas puede ayudar a reducir el colesterol. Un estudio de 2013 encontró que una dieta rica en avellanas disminuía los niveles de colesterol de lipoproteínas de baja densidad de los participantes”.
Avellanas
La porción ideal de avellanas al día es de 15 o 20 unidades. Con esto se cubre aproximadamente el 20% de vitamina E que se debe consumir diariamente.
La avellana es un fruto con bajo contenido de agua. Este tipo de productos se conserva mejor y durante más tiempo si se mantiene con la cáscara, pues la misma protege la parte comestible. Una vez pelada, tiene una vida útil de tres a cuatro meses si está en refrigeración o de un año en el congelador.
Este fruto suele utilizarse en preparaciones de pastelería, postres, granolas e incluso como adición en ensaladas. Adicionalmente, gracias a sus propiedades vermífugas (que mata o expulsa las lombrices intestinales), es posible transformar las avellanas en un purgante natural.
Para obtener leche de avellana solo es necesario molerlas, disolverlas en agua y luego pasarlas por un filtro o colador. Por su parte, la forma de convertir las avellanas en un purgante es combinarlas con jugo de piña. Esta es la receta que recomienda el portal Jugos Curativos.
Ingredientes:
- 50 gramos de avellanas crudas peladas.
- 700 ml de agua.
- 1 taza de jugo de piña.
- 1 cucharadita de canela en polvo.
Preparación:
Licuar las avellanas y el jugo de piña por algunos minutos. Luego, pasar el líquido por un colador de tela y guardarlo en la nevera. Endulzar con canela poco antes de servirla. Puede tomarse fría y caliente.
Contraindicaciones
La ingesta de avellana está contraindicada si hay un diagnóstico de obesidad. Su exceso de consumo puede causar una sobredosis de fibra y provocar dolores abdominales. Por el contrario, las avellanas, al igual que otros frutos secos, constituyen un complemento ideal en la dieta de quienes llevan a cabo una actividad física intensa.