El fruto seco que favorece la circulación de la sangre y ayuda a prevenir coágulos

Tener una buena circulación es una función vital para el organismo y en este proceso juega un papel determinante la alimentación y la práctica regular de ejercicio, así como otros hábitos saludables de vida.

La falta de actividad física, el consumo de alcohol y de tabaco, así como algunas enfermedades, entre ellas la obesidad, la diabetes y la hipertensión, pueden interferir de forma negativa en el proceso circulatorio, causando factores de riesgo para el corazón.

La mala circulación también puede surgir por un proceso natural de envejecimiento del cuerpo y, cuando esto ocurre es posible que se presenten síntomas como hinchazón de las piernas, calambres y temperaturas bajas en las manos y los pies, indica el portal de bienestar y salud Tua Saúde.

Como sucede para con muchas otras funciones del cuerpo, para que la sangre circule bien es necesario llevar una dieta equilibrada en la que se incluyan frutas y verduras, cereales integrales y proteínas magras. Esto ayuda a evitar afecciones como colesterol y los triglicéridos elevados, una de las principales razones detrás del taponamiento de las arterias, pues estos lípidos pueden adherirse a sus paredes causando estrechamiento de estos conductos.

En la larga lista de opciones de alimentos saludables para el corazón y, en general, para la circulación sanguínea están los frutos secos. Según el instituto de investigación Mayo Clinic son alimentos que contienen ácidos grasos insaturados y otros nutrientes que benefician el flujo de la sangre.

Los especialistas indican que hay diversas investigaciones en las que se ha concluido que la ingesta regular de estos productos disminuye los niveles de inflamación relacionada con la enfermedad cardíaca y la diabetes y dentro de las opciones recomendadas para mejorar la circulación está la almendra.

Almendras para las arterias

Se dice que este fruto seco ayuda a mejorar la salud de los vasos sanguíneos y arterias, a disminuir la inflamación relacionada con enfermedades cardíacas y a reducir el riesgo de que se formen coágulos de sangre, que pueden causar ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

Estos alimentos destacan por su riqueza en vitaminas A, B, C y E y en minerales como calcio y magnesio, nutrientes que son esenciales para mejorar la circulación sanguínea. Se recomienda el consumo de unos 30 gramos al día aproximadamente, según una publicación el medio El Español. La ingesta de estos frutos, al igual que la de nueces y cacahuates, ayuda a mejorar la función vascular.

En una publicación de la revista Mejor con Salud, la nutricionista Elisa Morales Lupayante, indica que comer almendras resultaría muy beneficiosos para el corazón. “Estudios realizados por diferentes expertos han señalado que aquellas personas que comen almendras de manera regular, es decir unas cinco veces por semana, ven disminuido el riesgo de padecer un infarto y otras enfermedades cardiovasculares”.

Las almendras son ricas en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, que ayudan con la reducción del colesterol malo, lípido que si se acumula en las arterias puede ocasionar taponamiento dificultando el flujo de la sangre.

También, son fuente de antioxidantes que evitan la oxidación de las células grasas, ayudando a equilibrar los niveles de lípidos. Según el portal Cuerpo Mente, uno de sus principales antioxidantes es la vitamina E. Consumir 30 gramos de este fruto seco permite obtener el 63 % de las necesidades diarias de este nutriente, indica la citada fuente. Esta es una vitamina liposoluble capaz de inhibir la oxidación de las grasas, por lo que protege la salud de las arterias y de los vasos sanguíneos.

Protege los huesos

La especialista Morales asegura que comer almendras podría ayudar a proteger y fortalecer los huesos y los dientes, dado su contenido de fósforo y calcio, dos minerales esenciales para la salud del aparato óseo. Según la Fundación Española de Nutrición, “una ración de 25 gramos de almendras sin cáscara aporta el 18 % de las ingestas diarias recomendadas de fósforo”.