Vida Moderna
El hábito que puede prolongar la vida después de los 80 años
La OMS estima que entre 2020 y 2030, el porcentaje de habitantes del planeta mayores de 60 años aumentará 34 %.
Hoy en día, en todo el mundo, las personas suelen vivir más tiempo que antes. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), todos los países del mundo están experimentando un incremento tanto en la cantidad como en la proporción de personas mayores en la población.
Como tal, la OMS estima que en el 2030 una de cada seis personas en el mundo tendrá 60 años o más y se prevé que el número de personas de 80 años o más se triplique entre 2020 y 2050, hasta alcanzar los 426 millones. En ese sentido, la pauta de envejecimiento de la población es mucho más rápida que en el pasado.
Sin embargo, llegar a los 80 años requiere de un estilo de vida saludable cargado de buenos hábitos como el ejercicio regular, el consumo de alimentos ricos en vitaminas y minerales, y una buena salud mental. Al llegar a esta edad es fundamental tener distintos hábitos óptimos para seguir prolongando mucho más los años.
Específicamente, una investigación presentada en el Congreso del CES 2022 de la Sociedad Europea de Cardiología, que se celebró en Barcelona, señaló que una hora de paseo, es decir, una caminata a la semana se asocia a una mayor longevidad en personas de 85 años o más. Expertos aconsejan a los adultos realizar al menos 150 minutos semanales de actividad de intensidad moderada o 75 minutos semanales de actividad de intensidad vigorosa, o una combinación equivalente.
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“Los adultos tienen menos probabilidades de cumplir las recomendaciones de actividad a medida que envejecen. Nuestro estudio sugiere que caminar al menos una hora cada semana es beneficioso para las personas de 85 años o más. En pocas palabras, caminar 10 minutos todos los días” afirmó el autor del estudio, el doctor Moo-Nyun Jin, del Hospital Sanggye Paik de la Universidad de Inje, en Seúl (República de Corea).
De acuerdo con el portal web Ok Salud, el estudio examinó la asociación entre caminar y los riesgos de mortalidad entre los adultos de 85 años o más. Como tal, los investigadores utilizaron información de la base de datos de ancianos del Servicio Nacional de Seguros de Salud de Corea (NHIS), en el que se incluyó a 7.047 adultos de 85 años o más que se sometieron al Programa Nacional de Exámenes de Salud de Corea entre 2009 y 2014.
Los participantes del estudio diligenciaron un cuestionario sobre la actividad física, en el que les preguntaban por el tiempo dedicado cada semana a caminar a ritmo lento, a actividades de intensidad moderada, como el ciclismo y la marcha rápida, y a actividades de intensidad vigorosa, como correr. Como resultado de esta investigación, 57,5 % de los participantes no caminaban a paso lento, 8,5 % caminaban menos de una hora, 12,0 % caminaban de una a dos horas, 8,7 % caminaban de dos a tres horas y 13,3 % caminaban más de tres horas a la semana.
“Caminar se relacionó con una menor probabilidad de morir en los adultos mayores, independientemente de que hicieran o no alguna actividad física de intensidad moderada a vigorosa. Identificar la cantidad mínima de ejercicio que puede beneficiar a los ancianos es un objetivo importante, ya que los niveles de actividad recomendados pueden ser difíciles de alcanzar” explicó el doctor Jin.
Como conclusión, el doctor Jin señaló que el estudio indicó que caminar, incluso solo una hora a la semana, aporta múltiples ventanas a los mayores de 85 años en comparación con la inactividad física.