Vida Moderna
El no consumo de esta vitamina produce insomnio y somnolencia
Esta actividad influye en las rutinas diarias de una persona.
De acuerdo con la National Heart, Lung and Blood Institute explica que el insomnio “es un trastorno frecuente del sueño” que se expresa en la dificultad que tiene una persona para dormir. Asegura que existen dos tipos de insomnio: el crónico, que no tiene explicación alguna; y el de corto plazo, que se asocia con el estrés.
Es de mencionar que un mal sueño puede ser el inicio de problemas de salud como la diabetes o la presión arterial. Asimismo, se pueden ver afectadas la memoria y la concentración.
Entre tanto, se deben observar los hábitos que, quizá, influyen de manera negativa en la calidad del sueño, como por ejemplo, el consumo excesivo de café o té, ya que al tener cafeína, esta actúa sobre el sistema nervioso, provocando nerviosismo, y taquicardia, generando alteraciones en el sueño.
También la falta de ejercicio y un consumo de alimentos de baja calidad pueden afectar esta actividad nocturna. No obstante, la falta de vitamina D también es un factor principal para el insomnio y somnolencia.
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Vitamina D
El cuerpo puede obtener este nutriente tras la exposición al sol o la ingesta de algunos alimentos ricos en él. Su principal función es su participación en la absorción de calcio por parte del cuerpo, por lo que la falta de esta vitamina es la causante de osteoporosis en los adultos y raquitismo en los niños.
Tanto los pescados, el queso, el hígado, las yemas de huevo, entre otros alimentos, tienen vitamina D.
Asimismo, y aunque pareciera inofensivo consumir demasiado esta vitamina, puede traer grandes daños al organismo, como por ejemplo, un gran impacto en los riñones, causando vómito, debilitamiento, desorientación, entre otros.
MedlinePlus, sugiere asistir de manera inmediata a un centro médico si se observan estos signos tras una sobredosis de estos nutrientes. Es entonces que el mucho consumo de vitamina D puede provocar exceso de calcio en la sangre y, por ende, somnolencia, insomnio y demás.
Otros trastornos del sueño
Muchos son los trastornos del sueño que se asocian con el adormecimiento, como por ejemplo:
- Apnea del sueño: este trastorno se conoce como apnea obstructiva del sueño (AOS) que impide esta actividad debido a que las vías respiratorias se ven bloqueadas por su ensanchamiento.
- Narcolepsia: la Clínica Mayo describe esta afección como un trastorno crónico del sueño “que se caracteriza por una somnolencia extrema durante el día y ataques repentinos de sueño.”
Se recomienda consultar con un profesional de la salud si se padecen episodios graves de sueño, además de consumir posibles infusiones que pueden ayudar en dichas alteraciones que inciden en una mala calidad de vida.
Asimismo, es importante dormir las ocho horas de sueño que recomiendan los expertos, pues es aquí donde el cuerpo pasa aproximadamente por cuatro fases, cinco veces en una noche y puede recuperarse de los trajines del día procesando recuerdos y experiencias vividas. Además de renovar el cerebro y experimentar la relajación en el cuerpo. Sin embargo, si hay dificultad para dormir, se recomienda consultar con un experto.
Durante el sueño una persona transita por varias fases, desde la más leve hasta la más profunda, llegando al sueño REM. Tua Saúde señala la importancia de conservar o cambiar hábitos a la hora de dormir para poder llegar a esta fase plenamente.
Cabe destacar, que no todas las personas la alcanzan; por ejemplo, el no consumo de cafeína, de alcohol, el no uso del celular minutos antes de ir a dormir y un ambiente totalmente oscuro para que la melatonina cumpla su función, pueden ser favorables para el descanso del cuerpo.