Vida Moderna
El superalimento que contiene propiedades sedantes, diuréticas y aperitivas
Esta planta es rica en agua, vitaminas y minerales que favorecen a la salud del organismo.
El apio pertenece a las plantas umbelíferas, predilectas en la preparación de diferentes platos, entre ellos, las ensaladas, explica la Fundación Española de la Nutrición (FEN). A su vez, señalan que esta planta está compuesto de potasio, flavonoides y proteínas, sin desestimar su alto contenido en agua, ideal para perder peso y desintoxicar el organismo, sin embargo, no es considerado un alimento que aporte energía.
Además, según la Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural de México, entre las principales propiedades nutricionales del apio se encuentran sus propiedades altas en fibra, es diurético, de bajo nivel calórico, con vitamina C y E, con potasio, sodio y calcio.
El portal vozpopuli en su sección de Bienestar también destaca varios beneficios que trae consumir de manera diaria el zumo de apio y sobre todo en ayunas. Una de ellas es su poder diurético.
El consumo de este jugo estimula los riñones para “que eliminen aquellos residuos que el cuerpo no necesita. De esta manera, también contribuye a eliminar la retención de líquidos y la celulitis”, así lo confirma el medio especializado Mejor con Salud.
Asimismo, el jugo de apio también sirve para eliminar de forma natural las grasas y sales que pueden ser nocivas para el organismo. Además, el agua ayuda a producir sensación de saciedad, para evitar el consumo de alimentos poco saludables, lo cual lo hace un aliado para quitarse esos kilos de encima.
Por lo general, la pesadez o malestar estomacal puede ser generado por una mala digestión después de consumir alimentos pesados o en grandes cantidades, y también se puede presentar inflamación o experimentar acidez y gases estomacales. Frente a este problema de salud, el instituto de investigación Mayo Clinic explica que cuando hay indigestión se presenta una molestia en la parte superior del abdomen y es probable que el paciente perciba dolor abdominal o una sensación de saciedad poco después de comenzar a comer.
Por lo que, el apio es un vegetal que posee entre un 90 y 95 % de agua en su composición, por lo que aporta muy pocas calorías (alrededor de 16 kcal por cada 100 g) y es una excelente opción para incluirla en dietas hipocalóricas destinadas a la pérdida de peso. En cuanto a la digestión, el té de apio es una infusión muy beneficiosa para el sistema digestivo, porque incrementa la producción de jugos gástricos y mejora las digestiones, ayudando así a que se queme una mayor cantidad de grasas y a perder peso.
De acuerdo con el portal Un Como, este té “tiene propiedades antibacterianas y antivirales muy útiles para combatir infecciones gastrointestinales. Además, evita el padecimiento de gases, hinchazón y cólicos abdominales”.
¿Cómo consumirlo?
El medio especializado en temas de salud Medical News Today explica que, específicamente, el jugo de apio puede ayudar a reducir la inflamación, la artritis y el colesterol alto. Otros beneficios de esta bebida van desde la protección contra el cáncer hasta el equilibrio de los niveles de hipertensión, esto debido a que es un vegetal que contiene luteolina y apigenina, que ayudan a proteger al organismo contra diversas enfermedades.
Este vegetal puede consumirse tanto crudo como cocido, pues a diferencia de otras hortalizas, el apio no pierde sus beneficios si se cocina al vapor. En caso de que cause indigestión, por ejemplo, consumirlo en ensaladas, al cocinarlo esos problemas desaparecerán.
También se puede ingerir en batidos verdes. Su sabor combina muy bien con frutas como la manzana, la pera o la piña. También se le puede agregar un toque de jengibre fresco. Estas bebidas son una opción para disfrutar de este alimento de una forma distinta, dentro de una alimentación balanceada.
También se puede ingerir en batidos verdes. Su sabor combina muy bien con frutas como la manzana, la pera o la piña. También se le puede agregar un toque de jengibre fresco. Estas bebidas son una opción para disfrutar de este alimento de una forma distinta, dentro de una alimentación balanceada.