El superalimento secreto para ganar masa muscular y eliminar la fatiga

La masa muscular es el conjunto de músculos que hay en el organismo y es muy importante en la prevención de lesiones, en la composición corporal y en la reducción del índice de grasa. Cuando se pierde, las personas se vuelven más susceptibles a enfrentarse a un desequilibrio y pérdida de fuerza, que puede incidir de forma negativa en su día a día.

Además del ejercicio físico, el cuerpo requiere de una buena alimentación para ganar o no perder masa muscular. La ingesta de productos que contengan carbohidratos y proteínas es clave, así como los cereales y los alimentos que contengan grasas saludables.

Dentro de las opciones para incluir en la dieta está la espirulina. Este alimento, poco común, es un tipo de alga que se utiliza como suplemento nutricional debido a que es fuente de vitaminas, minerales, antioxidantes y proteínas. Ha ganado reconocimiento debido a que la Nasa la ha utilizado como parte de la dieta de astronautas que han participado de misiones espaciales.

Aporta ácidos grasos esenciales, minerales como el potasio, magnesio, calcio, zinc, manganeso, selenio, hierro y fósforo; vitaminas como la E y las del grupo B, compuestos antioxidantes y antiinflamatorios y ácidos grasos poliinsaturados, según el portal Cocina Vital.

Hay investigaciones que indican que la espirulina puede mejorar el metabolismo de las grasas y de la glucosa, reduciendo la grasa acumulada en el hígado, protegiendo al corazón y favoreciendo la pérdida de peso, precisa el portal de bienestar Tua Saúde.

En cuanto a la masa muscular, se dice que este superalimento es favorable debido a que aporta un valor proteínico mayor que otros alimentos. El portal de estilo de vida unCOMO asegura que la espirulina tiene más proteína que la soya y que la carne y, además, es más fácil de digerir.

En su mayoría, la espirulina está compuesta por proteína vegetal, en la que se encuentran los ocho aminoácidos esenciales, que son aquellos que no produce el cuerpo y las personas deben obtener de los alimentos.

Como es sabido, el consumo de proteínas es una de las claves para ganar masa muscular si se acompaña con una rutina de ejercicios. Estos nutrientes contribuyen al desarrollo y crecimiento de los músculos. Lo que una persona debería ingerir de proteínas al día, si practica actividad física es por lo menos un gramo o gramo y medio por cada kilo de peso. Dado que no todas las personas que hacen ejercicio consumen proteína, la espirulina puede ser una alternativa.

Además de desarrollar el músculo, también actúa contra el agotamiento y la fatiga debido a su gran cantidad de vitaminas, minerales y ácidos grasos que hacen que la persona optimice el rendimiento y tenga más energía. Por otro lado, algunos de sus minerales como el hierro o el magnesio ayudan en la recuperación luego de la actividad física y reducen el riesgo de presentar calambres.

Otros alimentos buenos para los músculos

• Huevos: son una fuente importante de proteínas y vitamina D, además de contener muchos aminoácidos. Si bien existen mitos en torno a lo que este alimento puede generar en el cuerpo como incrementar el nivel de colesterol, lo cierto es que su consumo moderado no genera ninguna afectación de salud, dicen los expertos.
• Carne magra: La carne magra aporta 10 % o menos de grasa cada 100 gramos y puede ser de pollo o pavo, preferiblemente. Este es un alimento que brinda una importante cantidad de proteínas con pocas calorías.

• Pescado: El salmón y el atún son muy recomendados debido a que aportan un alto porcentaje de proteínas y omega 3. El atún particularmente se metaboliza rápido y posee 23 % de proteínas cada 100 gramos. Lo ideal es comerlo al natural o si se compra en lata, que sea en agua y no con aceites añadidos, indica el portal Spar Ring Center.

• Lácteos y quesos naturales: Lácteos como la leche brindan aminoácidos y proteínas que se digieren de manera relativamente lenta.
• Legumbres: Alimentos como las lentejas poseen gran cantidad de fibras, acido fólico, hierro y vitaminas de todo tipo.
• Frutas secas y avena: Los frutos secos como nueces y almendras son ricos en proteínas y fibras que las hacen ideales para consumir entre comidas; mientras que la avena resulta el mejor de los cereales porque aporta nutrientes y da la sensación de saciedad por más tiempo, además de incluir hierro, fósforo, carbohidratos y minerales.