Vida Moderna
El té natural que ayuda a perder peso y depura el organismo
La pérdida de peso puede darse más rápidamente en algunas personas.
Bajar de peso es el propósito de muchas personas y por ello buscan fórmulas mágicas y métodos rápidos para lograr disminuir tallas. Sin embargo, este tipo de dietas podría ocasionar efecto rebote, que es cuando se recupera el peso perdido al terminar la dieta rápida o se puede ocasionar que la persona se estanque en el peso. Es decir, que no suba ni baje esos kilos de más.
Por ello, la base para lograr bajar de peso sigue siendo una dieta saludable y baja en calorías, combinada con un aumento en la actividad física, pero esta puede estar acompañada de bebidas que aporten vitaminas y minerales y que, adicional, aceleren el metabolismo y así se depure.
Así las cosas, el portal Terra reveló que la infusión de boldo es ideal para adelgazar y solo se debe hervir un vaso de agua, agregarle hojas de boldo y dejar reposar por diez minutos.
De todos modos, la anterior recomendación debe estar acompañada de una alimentación balanceada y saludable que incluya proteínas, grasas, carbohidratos, frutas, verduras y todos los nutrientes que el cuerpo necesita.
Asimismo, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde presenta otros consejos para perder peso como:
1. Comer lentamente y saborear la comida: es recomendable masticar los alimentos entre 30 y 50 veces por bocado.
2. Comer al menos cuatro porciones de vegetales y tres porciones de frutas diariamente.
3. Beber más agua durante el día: el consumo diario de este líquido es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general la mayoría de los hombres necesita aproximadamente 13 tazas de líquido al día y la mayoría de las mujeres necesita aproximadamente nueve.
4. Realizar actividad física: entre las actividades físicas más comunes se destacan caminar, montar en bicicleta o correr, y todas ellas se pueden realizar con cualquier nivel de capacidad y para disfrute de todos. Además, las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes. Lo vital es que se tenga un gasto energético.
5. Eliminar el alcohol y los refrescos, porque ambos tienen un alto contenido calórico y para perder peso es clave tener un déficit calórico, que es cuando las personas consumen menos calorías que las que gasta en el día a día.
6. Elegir productos lácteos bajos en grasa, carne magra y carne de ave de corral magra en cantidades limitadas.
Sobre la misma línea, es importante señalar que, de acuerdo con Medline Plus, web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la pérdida rápida de peso puede ser útil para personas que tienen afecciones debidas a la obesidad. Para estas personas, perder mucho peso puede ayudar a combatir la diabetes, el colesterol alto y la presión arterial alta.
Por ello, el Ministerio de Salud explica que para saber si una persona está en un peso saludable existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura. Para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura, y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (kg) / Estatura al cuadrado (Mt).
Ejemplo:
Una persona pesa 64 kg y mide 1,5 metros: 64 / 1,5 x 1,5 = 28,44. Este dato indica el IMC de la persona (28,44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.
Esta fórmula no aplica a mujeres en estado de embarazo y debe ser ajustada si la persona tiene algún grado de edema (retención de líquido).
Criterios de evaluación del IMC:
- Si el IMC es inferior a 18,5, está dentro de los valores correspondientes a “delgadez o bajo peso”.
- Si el IMC es entre 18,5 y 24,9, está dentro de los valores “normales” o de peso saludable.
- Si el IMC es entre 25,0 y 29,9, está dentro de los valores correspondientes a “sobrepeso”.
- Si el IMC es 30,0 o superior, está dentro de los valores de “obesidad”.