El tipo de dolor de cabeza que podría advertir sobre una afección grave

Los dolores de cabeza se manifiestan como una molestia en esta región del cuerpo y corresponden a numerosas causas. Algunas de las más comunes son el estrés y el cansancio, por lo que el dolor puede desaparecer por sí solo luego de un tiempo o con la ayuda de medicamentos.

Sin embargo, es importante no subestimar los dolores de cabeza. De acuerdo con información de la enciclopedia médica MedlinePlus, las causas graves de estas molestias no son frecuentes, pero no por ello son inexistentes.

Dentro de las causas complejas y que requieren atención médica figuran: la hipertensión (presión arterial alta), sangrado en la zona entre el cerebro y el tejido delgado que los cubre, infección cerebral (meningitis, encefalitis o absceso), tumores cerebrales, acumulación de líquido dentro del cráneo (hidrocefalia), intoxicación con monóxido de carbono, falta de oxígeno durante el sueño (apnea de sueño), problemas con los vasos sanguíneos y sangrado en el cerebro.

¿Qué es el dolor tipo trueno?

Los dolores de cabeza pueden variar en cuanto a su intensidad y duración. En tal virtud, es recomendable consultar con un especialista médico para obtener un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado para aliviar y prevenir futuras molestias.

Según reseña Mayo Clinic, existe una clase de dolor de cabeza conocido como tipo trueno, el cual ocurre repentinamente. Por lo general, estos dolores alcanzan su máxima intensidad en un lapso de 60 segundos.

“Los dolores de cabeza en trueno son poco frecuentes, pero pueden ser un signo de advertencia de afecciones que ponen en riesgo la vida, a menudo asociadas al sangrado dentro del cerebro o alrededor de este”, puntualiza el portal citado. En ese sentido, sugiere acudir de urgencias al médico en caso de padecer un dolor de cabeza de este tipo.

Síntomas del dolor de cabeza tipo trueno

La principal característica de este tipo de dolores es que son muy fuertes, además, se producen repentinamente y de manera intensa. También puede estar acompañado de náuseas y vómitos.

Otros síntomas que suelen venir de la mano con el dolor de cabeza tipo trueno son: alteración del estado mental, fiebre y convulsiones. Lo crucial frente a este tipo de molestia es entender que puede estar asociada a un problema de salud potencialmente grave, por ello, resulta imperativo acudir a un médico para tratarlo.

Causas del dolor de cabeza tipo trueno

De acuerdo con Mayo Clinic, “no existe una causa evidente para algunos dolores de cabeza en trueno”. No obstante, menciona algunas causas asociadas a otras afecciones que pueden poner en riesgo la vida de la persona:

• Sangrado entre el cerebro y las membranas que lo recubren (hemorragia subaracnoidea).
• Una rotura de un vaso sanguíneo del cerebro.
• Un desgarro en el revestimiento de una arteria que le suministra sangre al cerebro.
• Filtración de líquido cefalorraquídeo.
• Muerte de tejido o sangrado en la hipófisis.
• Un coágulo en el cerebro
• Aumento grave de la presión arterial (crisis hipertensiva).
• Una infección, como meningitis o encefalitis.
• Accidente cerebrovascular isquémico.

¿Cómo aliviar el dolor de cabeza?

Ante el dolor tipo trueno, los más conveniente es acudir inmediatamente a un especialista médico. Sin embargo, si se trata de una molestia más general, se pueden implementar algunos cuidados desde el hogar.

Para casos en los que la molestia es causada por la migraña o dolores de cabeza tensionales (tensión muscular en los hombros, el cuello, el cuero cabelludo y la mandíbula), MedlinePlus comparte las siguientes recomendaciones:

• Beber agua para evitar la deshidratación (sobre todo si se ha vomitado).
• Descansar en una habitación tranquila y oscura.
• Colocar un paño frío sobre la cabeza.
• Utilizar cualquier técnica de relajación.

Así mismo, si los dolores se vuelven recurrentes, vale la pena llevar un diario con el objetivo de compartir dicha información con un médico y evaluar detalladamente el caso.

• Anotar la fecha y la hora en que comenzó el dolor.
• Anotar los alimentos ingeridos en las últimas 24 horas.
• Cuántas horas de sueño hubo la noche anterior.
• Qué actividad se estaba desarrollando antes y durante el dolor.
• Duración e intensidad del dolor de cabeza.