Vida Moderna
El tipo de té que no se debe tomar si se sufre del corazón
Practicarse chequeos médicos con frecuencia ayuda a evidenciar cómo está la salud del corazón.
Proteger la salud del órgano vital es uno de los factores más importantes en la vida de todo ser humano. Las principales recomendaciones médicas para cuidar el corazón son la práctica de ejercicio constante, una alimentación saludable y el dormir bien.
Si estos tres hábitos no se cumplen se incrementa el riesgo de sufrir una enfermedad del corazón. Las afecciones de este órgano más comunes son la angina, el ataque cardíaco, la insuficiencia cardíaca, la hipertensión arterial, la arritmia, entre otras más.
Por ejemplo, en lo que corresponde a la alimentación hay que tener mucho cuidado y más si se sufre del corazón. De acuerdo con los profesionales de la salud, cuando una persona tiene un padecimiento relacionado con el órgano vital debe limitar la cantidad de consumo de varios alimentos y uno de estos es la sal.
De igual manera, se le debe prestar gran atención a las infusiones o los tés, pues a pesar de contar con tantas propiedades que benefician al organismo, si uno de estos se consume en cantidades desproporcionadas puede afectar de una alta manera al corazón.
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El té en cuestión es el verde, así lo ha señalado el portal de la Fundación Española del Corazón. “Puedes consumir té verde, una o dos tazas al día, pero no debes abusar de su consumo, ya que contiene teína que es un estimulante parecido a la cafeína y en altas dosis puede aumentar la tensión arterial y ser perjudicial si padeces una insuficiencia coronaria”.
Beneficios increíbles que brinda tomar té verde en cantidades moderadas
Un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition asegura que el té verde ayuda a acelerar el metabolismo y aumenta la quema de calorías y grasa, necesaria para bajar de peso. Si bien, este promueve la termogénesis, lo que se conoce como generación de calor corporal, que se produce como resultado de la digestión normal, metabolización y absorción de los alimentos.
Además, gracias a sus propiedades diuréticas, se considera que es un buen remedio contra la retención de líquidos. Por esta razón, podría también contribuir con la desinflamación del abdomen.
Sin embargo, no solo resulta un termorregulador corporal eficaz para el cuerpo, sino que además su consumo supone un método de prevención contra el alzhéimer o, al menos, una forma de reducir los riesgos de desarrollar esta enfermedad, según un reciente estudio realizado por la Universidad de McMaster, en Canadá, y publicado por el Journal of the American Chemical Society.
Por otra parte, es un buen estimulante, es rico en algunas bases xánticas como la cafeína, la teobromina y la teofilina, todas ellas ayudan a estimular el sistema nervioso y dar una sensación de más energía, según el portal de salud Promofarma.
¿Cómo preparar té verde?
Té verde con miel:
Ingredientes
- 1 vaso de agua (250 ml).
- 1 cucharada de té verde (10 g).
- Opcional: miel de abejas (1 cucharadita).
Preparación
- Calentar la taza de agua y, cuando llegue a ebullición, agregar la cucharada de té verde.
- Dejar reposar 15 minutos, pasarla por un colador y, si se desea, agregar una cucharada de miel para endulzar.
Té verde con menta:
El té verde, junto con la menta, añade un gran efecto calmante que disminuiría la ansiedad por comer y contribuiría con la salud del sistema digestivo y el colesterol malo.
Ingredientes
- 1 vaso de agua (250 ml).
- 1 cucharada de té verde (10 g).
- Menta fresca (unas cuantas hojas.
- Opcional: miel (1 cucharadita).
Preparación
- Calentar el agua y, cuando llegue a ebullición, agregar el té verde y la menta.
- Dejar a fuego bajo durante 5 minutos y, a continuación, retirar y esperar a que repose.
- Cuando esté a una temperatura apta para el consumo, pasarla por un colador y por último, endulzar con una cucharadita de miel.
- Se recomienda consumir con moderación.