Vida Moderna
El vegetal que regula la presión y previene el cáncer: así se debe consumir
SI bien este alimento ofrece numerosos beneficios para el organismo, su consumo no sustituye el tratamiento médico.
La presión arterial representa una preocupación común durante las visitas de rutina al médico. Si bien el concepto general señala que tener la tensión por fuera de los límites normales resulta perjudicial para la salud, hay quienes no comprenden a la perfección qué indica este valor.
De acuerdo con información de la enciclopedia médica MedlinePlus, la presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo. Hipertensión es el término que se utiliza para describir la presión arterial alta, mientras que hipotensión se refiere a cuando la presión es más baja de los normal.
“Si se deja sin tratamiento, la presión arterial puede llevar a muchas afecciones médicas. Estas incluyen enfermedades del corazón, accidente cerebrovascular, insuficiencia renal, problemas en los ojos y otros problemas de salud”, advierte la fuente consultada.
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) recogen que, para controlar la presión arterial, es recomendable adoptar un estilo de vida saludable para el corazón. Para ello, es conveniente adoptar una alimentación balanceada y, de ser necesario, consumir medicamentos especiales bajo prescripción médica.
Tendencias
A propósito de la alimentación para regular la presión, el portal Mejor con salud destaca las propiedades de la espinaca, un vegetal rico en vitaminas, minerales y fitoquímicos con múltiples beneficios para el organismo.
Puntualmente, la espinaca es un vegetal compuesto principalmente por agua. Además, contiene pocos hidratos de carbono, aunque es rica en proteínas, vitaminas A, B, C, E y K, minerales como calcio, hierro, potasio, magnesio y fósforo, así como ácidos grasos omega 3.
Beneficios de la espinaca
Al ser una buena fuente de potasio y tener poca cantidad de sodio, la espinaca resulta ser un gran alimento para personas que padecen hipertensión. El citado portal resalta que el potasio contribuye a regular la presión arterial; por su parte, el sodio la eleva.
Otra cualidad que se le atribuye a la espinaca tiene que ver con posibles efectos anticancerígenos. “Los diferentes componentes de las espinacas, como el folato, tocoferol y la clorofilina, actúan a través de diferentes mecanismos que resultan beneficiosos contra esta enfermedad”, anota Mejor con salud.
No obstante, hay que mencionar que el consumo de espinaca no sustituye bajo ningún concepto el abordaje médico. En ese sentido, es conveniente integrar este vegetal dentro de un esquema de alimentación balanceada. Así mismo, es aconsejable acudir a un profesional de la salud para establecer el tratamiento adecuado.
Dieta para regular la hipertensión y bajar de peso
Voz Populí en su sección de salud y cuidado personal menciona una dieta que puede ser implementada por pacientes que ya han sido diagnosticados con hipertensión y que a su vez tienen problemas con el peso elevado. Cabe mencionar que antes de seguir este tipo de recomendaciones es pertinente contar con la aprobación del médico que está tratando dicha afección.
La dieta DASH fue creada con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes diagnosticados con presión arterial elevado o hipertensión. En medio de este plan de alimentación se prioriza en consumo de alimentos que contengan elevadas cantidades de potasio, magnesio y calcio, además se consumen productos con un bajo contenido de sodio.
Esta dieta prioriza el consumo de alimentos en su estado natural y desplazada los productos ultraprocesados que se camuflan con frecuencia en la dieta de toda persona. El medio brinda algunas pautas que pueden guiar al paciente que quiere implementar este plan de alimentación.
- Debe incluir un alto contenido de frutas y verduras. Las primeras pueden estar presentes en el desayuno y las dos meriendas del día (mañana y tarde) y la verdura tanto en el almuerzo como en la cena. La idea es variarlas para poder aprovechar los nutrientes y vitaminas de la mayoría.
- Elevar el consumo de pescados (salmón, atún, caballa) y de carnes magras.
- Consumir legumbres, al menos un par de días a la semana (mínimo dos).
- Ingerir semillas y cereales, siempre en su versión integral y natural.
- Incluir un puñado de nueces a diario.
- Consumir únicamente productos lácteos bajos en grasa.
- Reducir el consumo de sal y hacer uso de especias o productos naturales para reemplazarlo como el ajo.
- Limitar la ingesta de la carne roja.
- Evitar los embutidos.
- Acompañar los alimentos con agua y eliminar las bebidas cargadas de azúcar como gaseosas y jugos industrializados.