SALUD

¡Deje llorar a su bebé!

Un estudio reveló que los padres deberían dejar que los niños lloren hasta dormirse si se despiertan en la noche.

24 de mayo de 2016
Una buena opción para que los bebés empiecen a dormir todas las noches es definir horarios para las comidas, el baño, los juegos y otras actividades.

Muchos padres no pueden dormir porque sus bebés se despiertan llorando varias veces en la noche. Sin embargo, ya hay varias parejas que han decidido dejarlos llorar hasta que se vuelvan a dormir y aunque para algunos esta opción es cruel y un tanto peligrosa, un estudio de la Flinders University in Adelaide de Australia reveló que esta elección es eficaz y no causa estrés o problemas emocionales duraderos para los niños.

Los investigadores que desarrollaron la tesis trabajaron con 43 parejas que tienen hijos de entre 6 y 16 meses de edad y que tienen una queja común: su hijo presenta problemas para dormir.

Al grupo A le pidieron que empezara a demorarse más tiempo antes de ir a consolarlos cuando se despertaran en las noches. Y al grupo B le pidieron que dejara a sus bebés lo más cerca posible para que cuando lloraran pudieran ir a atenderlos rápidamente.

Tres meses después, los investigadores encontraron que los bebés a los que los dejaban llorar se dormían 15 minutos más rápido que aquellos a los que se les atendía rápidamente.

Los investigadores encontraron también que los niveles de cortisol, una hormona del estrés, fueron más bajos en los bebés del grupo A. Adicionalmente, un año después de las intervenciones, los padres de este grupo reportaron menos problemas de comportamiento en comparación con los bebés del grupo B.

Marsha Weinraub, profesor de psicología en la Universidad de Temple, está de acuerdo con que las ganancias en el sueño ayudan a bebés y padres. "Cuando usted está esperando a su bebé para ir a dormir, cada minuto cuenta", dijo Weinraub al canal de noticias CNN.

Por su parte, Michael Gradisar, profesor de psicología y autor del estudio publicado por la revista Pedriatrics, aseguró que los bebés del grupo A se dormían más rápido una semana después de que sus padres comenzaron el experimento, y continuaron mejorando durante el período de tres meses.

Gradisar también dijo que cuando los bebés duermen bien es posible detectar más fácilmente los resfriados u otros dolores, ya que el llanto sería un indicador de dolor o de hambre y no de un mal hábito.

Los padres pueden sentir mucha culpa por no consolar a sus bebés mientras están llorando. Pero los expertos explican que mediante el establecimiento de un límite claro y lleno de amor para su hijo, los niños pueden sentirse mejor.

Es importante tener en cuenta que los bebés menores de 6 meses necesitan alimentarse constantemente y por eso sí será necesario que los padres estén pendientes de ellos durante las noches.