VIDA MODERNA
¿Es verdad que el estrés baja las defensas?
En ocasiones, el organismo no está preparado para sentir estrés, por lo que se recomienda controlar algunas emociones y acciones.
Sentir tensión física y emocional son las principales causas del estrés, el cuerpo reacciona ante estas condiciones y generan molestias en el organismo, por lo que es común que el sistema inmunológico pueda verse afectado.
Teniendo en cuenta un análisis realizado por la Clínica Las Condes, factores como el estrés en las personas pueden contribuir negativamente a las defensas y bajarlas; esto se da porque, posiblemente, al sentir tensión se aumenta la producción de adrenalina y cortisol, y se disminuyen los leucocitos o glóbulos blancos.
En ese sentido, el cuerpo no está preparado para reaccionar a algún virus y, a su vez, hay menor presencia de las células que defienden a los organismos de posibles infecciones, por lo que se aumenta el riesgo de contraer alguna enfermedad.
Para la psicóloga Daniela Toro, no todas las personas se enferman por estrés: “No todas las personas tienen la misma percepción de amenaza en relación a determinadas situaciones de la vida. Como uno percibe la situación tiene un carácter subjetivo”, una característica por la que se bajan las defensas tiene que ver con la personalidad de la persona, ya que “personas aceleradas, competitivas, autoexigentes, que se preocupan en exceso, impacientes y agresivas son las que comúnmente tienen mayor riesgo de infección”, recalcó.
Lo más leído
Desde luego, Toro también indica que los niveles de estrés en los que el sujeto se ve sometido depende de qué herramientas dispone para enfrentar una situación poco agradable en el entorno.
El estrés es una tensión que no se puede controlar del todo, a veces el cuerpo lo genera como una forma de alarma para avisar al individuo que debe tomar una pausa y descansar, asimismo, es necesario analizar las amenazas: “Si las amenazas aparecen, se debe comprender qué aspectos se pueden cambiar o saber llevarlas”. Al autoimponerse, lo único que se está generando es estrés en grandes proporciones, puntualizó la especialista.
Una de las formas para combatir el estrés y evitar que se bajen las defensas en el organismo son la implementación de actividades relajantes y placenteras en el diario vivir; así, al llevar a cabo pasatiempos relajados y socializar sobre ellos, se reduce la tensión física o emocional y los niveles de cortisol.
El peligro de una situación estresante prolongada es que puede terminar en el síndrome de ‘burnout.’ SEMANA habló con María Camila Umaña, estudiante de doctorado en psicología de la Universidad de los Andes, quien cuenta cuáles son las señales de alerta y cuáles son las circunstancias laborales que más lo promueven:
Por otro lado, el estrés puede afectar el crecimiento de la masa muscular: “¡El estrés puede dificultar incluso disfrutar los beneficios del ejercicio!”, recalca el portal Inbody México en un informe sobre cómo el estrés pasó de ser algo que genera atención y un estado de alerta, a una situación que puede llevar a perjudicar el organismo. “A medida que los humanos evolucionaron, los desafíos que enfrentamos han pasado del estrés agudo (como un ataque animal) al estrés constante”, resalta el citado medio sobre el peligro de mantenerse en constante estrés.
Según Inbody México, desde 1964 los expertos analizaron que el cortisol impide la síntesis de las proteínas, la cual es importante para desarrollar la masa muscular. “Los investigadores imitaron un estado estresado en sujetos de prueba sanos al agregar cortisol a sus sistemas a través de tabletas intravenosas y orales. Descubrieron que el cortisol y la inactividad estaban relacionados con la pérdida de masa corporal magra”, resaltó el medio y añadió que la inactividad afecta la formación muscular. Sumado al aumento de cortisol, el organismo va a presentar más problemas y será más constante la pérdida de la musculatura.