Salud
Espinaca: así se debe consumir para reducir la presión arterial
La hipertensión es la principal causa de morbimortalidad en el mundo y es el factor de riesgo cardiovascular más prevalente.
El poder nutritivo de la espinaca radica en su alto contenido de vitaminas y minerales. Además, contiene calcio, fosfato, azufre, clorofila, oligoelementos, enzimas, fibra, y a pesar de que sus proteínas no son tan abundantes, son más completas que en otras hortalizas.
La gran variedad de elementos nutricionales que contiene la espinaca lo hace un alimento indispensable para preservar el buen funcionamiento del organismo. Entre algunas de sus propiedades, la espinaca aporta energía, ayuda a combatir la anemia, previene el cáncer, mantiene la salud ósea, previene el envejecimiento prematuro, reduce los problemas digestivos y gracias a su luteína previene la perdida de la agudeza visual.
Entre los beneficios que más destaca a esta hortaliza es que ayuda a reducir la presión arterial. Un equipo de investigadores del Instituto Karolinska de Estocolmo, Suecia, ha demostrado que los nitratos inorgánicos, presentes en las verduras como las espinacas, tras entrar en contacto con las bacterias bucales producen óxido nítrico. Este componente tiene un efecto vasodilatador en las arterias, lo que ayuda a abrirlas y, por lo tanto, mejora su función, y contribuye al control de la presión arterial.
“Hasta hace poco se creía que los nitratos procedentes de la dieta eran sustancias potencialmente tóxicas, pero ahora, gracias a este estudio, se ha descubierto que no solamente no son perjudiciales, sino que pueden aportar un beneficio en el sistema vascular”, destaca la Dra. Regina Dalmau, miembro de la SEC y cardióloga de la Unidad de Rehabilitación Cardiaca del Hospital La Paz de Madrid.
Cabe resaltar que la presión alta hace referencia a la hipertensión, que según la Fundación del Corazón, es la principal causa de morbimortalidad en el mundo y es el factor de riesgo cardiovascular más prevalente: “Sus cifras de incidencia son muy altas, en España son 11 millones de personas las que padecen esta enfermedad (47% de los hombres y 39% de las mujeres)”.
De este modo, la fundación recomienda el consumo moderado de espinacas como prevención de enfermedades cardiovasculares, como lo es la hipertensión arterial. Por su parte, la doctora Dalmau aconseja que las personas que padezcan hipertensión continúen toman su medición normal, puesto que el consumo de espinacas no es un tratamiento sino una medida preventiva.
“Lo que sí que es importante es mantener unos hábitos de vida cardio saludables que incluyan el seguimiento de una dieta rica en frutas y verduras, la práctica de ejercicio y evitar hábitos nocivos como el tabaquismo”, advirtió la doctora.
¿Cómo consumir la espinaca?
De acuerdo con Medical News Today, la espinaca es un vegetal versátil que se puede consumir cruda o cocida, y que se puede encontrar fresca, congelada o enlatada. Estas son algunos formas de introducir la espinaca a la dieta diaria:
- Agregar espinacas bien lavadas, en trozos pequeños, en sopas, pastas y guisos.
- Las espinacas se pueden preparar salteadas en una pequeña cantidad de aceite de oliva extra virgen. También se puede hacer sazonada con pimienta negra, recién molida y queso parmesano rallado.
- Se puede preparar una salda con espinacas, alcachofas y queso cabra.
- Otra forma de incluirlo en el desayuno es con pequeños trozos en un omelet o huevo revuelto.
- Batidos o smooties.
Contraindicaciones de la espinaca
Es importante tener presente que las personas que estén consumiendo anticoagulantes, como warfarina, es fundamental que no cambien repentinamente la cantidad de alimentos que ingieren que contienen vitamina K, dado que desempeña un papel importante en la coagulación de la sangre.
Del mismo modo, el consumo excesivo del potasio que contiene la espinaca puede ser perjudicial para las personas que tienen problemas renales. Si los riñones no pueden eliminar el exceso de potasio de la sangre, esto podría llegar a ser fatal.