Esta enfermedad se produce cuando hay cansancio y dolor muscular

Por lo general, el estrés es el principal causante del dolor muscular y el cansancio en todo el cuerpo. Sin embargo, cuando estos síntomas, cuando son crónicos, surgen debido a una afección denominada fibromialgia que se puede padecer a cualquier edad, pero es más frecuente en mujeres entre los 20 y 50 años.

De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, esta dolencia suele está relacionada con la fatiga, problemas de sueño, dificultad de concentración, dolores de cabeza, depresión y ansiedad.

Hasta el momento se desconoce la causa exacta que genera esta afección, sin embargo, varios investigadores señalan que la fibromialgia se debe a un problema relaciona con el sistema nervioso central que procesa el dolor. Entre las posibles causas desencadenantes que pueden influir en este problema de salud son:

• Trauma físico o emocional.
• Una respuesta anormal al dolor. Las áreas en el cerebro que controlan el dolor pueden reaccionar de manera diferente en las personas con fibromialgia.
• Alteraciones del sueño.
• Infección, como un virus, aunque no se ha identificado ninguno.

Además de estas posibles causas, Medline Plus indica que existen afecciones que también la pueden generar, entre ellas, síndrome de fatiga (crónica) prolongada, depresión, hipotiroidismo (tiroides hipoactiva), enfermedad de Lyme y trastornos del sueño.

Síntomas de la fibromialgia

Como tal, el dolor generalizado es el principal síntoma que caracteriza esta afección. Los lugares más afectados del cuerpo son la cabeza, cada brazo, el pecho, el abdomen, cada pierna, la parte superior de la espalda y la columna vertebral, y la parte inferior de la espalda y la columna vertebral (incluyendo las nalgas).

Esta dolencia puede ser leve o fuerte, es decir, se puede sentir un dolor sordo y constante o ardiente y en algunos casos, las articulaciones no se afectan aunque el dolor pueden sentirse en ellas. Asimismo, el dolor pueden empeorar con la actividad física, el clima o factores mentales como la ansiedad y el estrés.

Entre tanto, también se pueden presentar otros síntomas como:

• Síndrome del intestino irritable (SII) o reflujo gastroesofágico (ERGE)
• Problemas de memoria y concentración
• Entumecimiento y hormigueo en manos y pies
• Disminución de la capacidad para el ejercicio
• Tensión o migrañas

¿Cómo tratar la fibromialgia?

Para contrarrestar los dolores por fibromialgia existen diferentes tratamientos. Uno de ellos es tomar infusiones que ayudan a disminuir las molestias y, según el portal Nuevas Evas, los mejores son:

Infusión de cúrcuma: Mejor con Salud señala que “gracias a las propiedades antiinflamatorias de la cúrcuma, esta mezcla disminuye las tensiones musculares y la rigidez en las articulaciones. Además, estimula el funcionamiento del sistema inmunitario, lo cual resulta beneficioso en el tratamiento de la fibromialgia”.

Infusión de Rhodolia: la Rhodiola rosea es una plata medicinal que ayuda a aliviar los síntomas de la fibromialgia, tales como la ansiedad y la depresión, ya que contiene compuestos que promueven en aumento de las endorfinas.

Ingredientes:

• Dos cucharadas de raíz de cúrcuma fresca rallada o 1 cucharadita de cúrcuma en polvo (10 g).
• Cuatro tazas de agua (1 lt).
• Miel.
• Limón fresco.

Procedimiento:

• En una olla poner a hervir las cuatro tazas de agua.
• Una vez el agua comience a burbujear, agregar la cúrcuma.
• Si la cúrcuma es rayada, debe dejar el té en el fuego por 20 minutos más.
• Si la cúrcuma es en el polvo, se debe dejar el líquido en la estufa por 10 minutos.
• Una vez pasado el tiempo, pasar el té por un colador para eliminar los residuos de cúrcuma.
• Agregar limón y miel al gusto.
• Servir y consumir.

Infusión de tomillo: Mejor con Salud indica que “el tomillo es rico en flavonoides, por lo que tiene propiedades antioxidantes excelentes para detener el deterioro de los tendones, ligamentos y las articulaciones”.

Ingredientes:

• 5 gramos de tomillo.
• 1 taza de agua.
• 1 cucharada de miel.

Procedimiento:

• Agregar el tomillo en una taza de agua hirviendo y deja reposar.
• Una vez la infusión se asiente, se debe colar y endulzar con la miel.
• Ingerir dos veces al día, lo más caliente posible.