Esta es la alternativa saludable para equilibrar el azúcar y promover una digestión óptima

Una vida libre de enfermedades: ese es el sueño de miles de personas en el mundo. El asunto es que muchos no lo logran debido a que son muy pocos los que están dispuestos a pagar el precio por una vida sin enfermedades.

Y es que esto incluye modificar drásticamente los malos hábitos que se han practicado durante muchos años actividades más benéficas como dormir temprano, no comer alimentos ultraprocesados (con demasiadas azúcares) y abandonar el consumo de comida chatarra, los cigarrillos y la falta de ejercicio para tener buenos resultados.

Sin embargo, es posible ir cambiando algunos de esos malos hábitos para vivir de manera saludable. Esto quiere decir que, si por ejemplo, se tiene una vida sedentaria, podrían empezarse a realizar caminatas cortas de 15 o 20 minutos, y ya después hacerlas más largas.

Asimismo, en la alimentación se pueden agregar algunos alimentos que comúnmente no se consumían, y que aportan grandes beneficios al organismo. Uno de ellos es el aceite de linaza, que, entre muchas de sus propiedades, ayuda a equilibrar el azúcar en la sangre y promueve una digestión óptima, evitando el estreñimiento o la soltura.

La linaza es un alimento de origen vegetal, “proporciona grasas saludables, antioxidantes y fibra, entre otras cualidades que lo hacen único en su especie, ya que ha tenido un papel en la medicina ayurvédica durante miles de años atrás”, de acuerdo con Gastrolab.

Además, de la semilla se extrae el aceite de linaza, el cual es rica en ácidos grasos de las series Omega 3, Omega 6 y Omega 9.

De igual manera, la linaza usualmente es conocida por su capacidad para reducir los niveles de colesterol malo en la sangre, pero cuenta con propiedades antiinflamatorias debido al Omega 3, que es uno de los aceites esenciales que no solo sirven para mejorar el sistema cardiovascular, sino que también refuerza el sistema inmunológico (defensas), previniendo la aparición de infecciones alrededor de las articulaciones.

Dicho esto, para ayudar con la regulación de la azúcar en la sangre, las -también llamadas- semillas de lino “podrían reducir el nivel de azúcar en sangre. Su consumo junto con medicamentos para la diabetes, hierbas o suplementos con potencial hipoglucémico podría bajar demasiado el nivel de azúcar”, según Mayo Clinic.

Pero no solamente eso, pues según la Arthritis Foundation, esta semilla reduce el dolor y la rigidez de las articulaciones. Algunas personas la consumen para ayudar a aliviar la artritis reumatoide, el lupus y el fenómeno de Raynaud.

Además, la linaza contiene fibra soluble. Es decir, que no se disuelve en agua, sino que se mantiene circulando dentro del tracto digestivo, después de consumirla. Estando allí absorbe volumen y agua; ayudando a promover la regularidad, cuidando la salud del intestino y previniendo los síntomas del estreñimiento.

Además, al tener fibra insoluble, su consumo puede disminuir el riesgo de las enfermedades cardíacas y disminuye el azúcar alto en la sangre, previniendo la diabetes.

De hecho, un estudio destacado en el portal Healthline, menciona que “personas con diabetes tipo 2 tomaron lignanos de linaza durante 12 semanas vieron una mejora significativa en la hemoglobina A1c”.

Sumado a lo anterior, la linaza es una de las mejores aliadas para las dietas con fines de perder peso. Sus propiedades ayudan a tener una mejor digestión, mejoran el metabolismo y proporcionan sensación de saciedad.