Vida Moderna

Estas son las enfermedades oculares a causa de frotarse los ojos

Cuando los ojos arden o pican la respuesta sería frotarlos, pero los expertos explican las consecuencias de esta práctica.

24 de marzo de 2022
Rascarse los ojos muy seguido puede generar afectaciones como: deformidad de la córnea, ojos rojos, infecciones, lesiones entre otras. Foto: Getty images.
Rascarse los ojos muy seguido puede generar afectaciones como: deformidad de la córnea, ojos rojos, infecciones, lesiones, entre otras. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

Rascarse los ojos por alguna molestia o porque entran partículas extrañas no genera un riesgo, pero cuando esto se vuelve una actividad rutinaria puede generar problemas en la salud visual.

“Una persona al frotarse los ojos de manera compulsiva produce un acortamiento de la longitud del ojo -de la parte anteroposterior- que se ensancha en el sentido transversal. Esto hace que el vítreo se desprenda de la retina y puede provocar un desprendimiento de retina”, así lo explica José Benítez del Castillo, catedrático de Oftalmología de la Universidad Complutense de Madrid y oftalmólogo de la Clínica Rementería, en palabras recogidas por el portal Cuídateplus.

Otra advertencia que hacen en el mencionado portal es que los pacientes que sufren de miopía son más propensos al desprendimiento de retina, “por lo que frotarse los ojos puede favorecer que esto ocurra, además de la aparición de un queratocono”.

Otro experto en el tema de la salud visual, Francisco José Muñoz Negrete, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Ramón y Cajal, de Madrid, añadió que “frotarse continuamente los ojos puede dañar el músculo encargado de elevar el párpado y producir una ptosis palpebral, es decir, una caída del párpado”, en palabras que citó Cuídateplus.

De acuerdo a Mayo Clinic, frotarse los ojos vigorosamente es uno de los factores de riesgo para sufrir de queratocono, además de “tener antecedentes familiares de queratocono y tener ciertas afecciones, como retinitis pigmentaria, síndrome de Down, síndrome de Ehlers-Danlos, fiebre del heno y asma”.

Es importante entender que el queratocono se produce cuando “la córnea (la superficie frontal transparente y en forma de cúpula del ojo) se hace más fina y gradualmente sobresale en forma de cono”, esto puede generar visión borrosa y puede producir sensibilidad a la luz y al resplandor, explica Mayo Clinic.

El especialista citado por Cuídateplus José Benítez del Castillo señala que “el colágeno da fuerza a la córnea y le dota de un andamiaje que evita que se deforme”, pero advierte los riesgos que genera frotarse los ojos pues se puede “producir una inflamación que destruye el colágeno haciendo que la córnea ya no mantenga la estructura sino que se deforme y se convierta en cónica”.

“Al frotar en exceso la córnea se ejerce una presión que hace que se deforme progresivamente, dando lugar a un cambio en su forma y curvatura”, así lo explica el coordinador del Departamento de Córnea y Cirugía Refractiva de IMO, el doctor José Luis Güell, en palabras citadas por Infosalus.

El especialista también asegura “que aún no se ha establecido la frecuencia exacta con la que frotarse los ojos podría ser perjudicial”, pero destaca que cuando esta práctica se vuelve repetitiva puede poner en riesgo la salud visual.

Expertos aseguran que “hay una estrecha relación entre frotarse los ojos y el queratocono, ya sea como desencadenante del mismo o como factor que lo agrava”, afirma el doctor del Departamento de Córnea y Cirugía Refractiva de IMO, Óscar Gris, en palabras citadas por el portal.

El especialista también aconseja tener mucho cuidado al frotarse los ojos, particularmente en los pacientes con queratocono, una patología que, “es la principal causa de trasplante de córnea en pacientes jóvenes, pese a que si se diagnostica a tiempo puede ser tratado satisfactoriamente con la técnica conocida como ‘Crosslinking corneal’”, señala el portal Infosalus.

En Cuídateplus aconsejan “utilizar lágrimas artificiales o frías que producen un efecto lavado”, pero si no hay recursos se puede recurrir a “echar agua fresca -lo más posible- sobre los ojos”. Esto ayuda a “lavar el polen en los ojos y tiene un efecto analgésico y antiinflamatorio”.