Vida Moderna
Estas son las enfermedades por las que se pueden perder los dientes
Es importante realizar una limpieza regular de los dientes practicada por el dentista.
Los dientes son una parte del cuerpo muy importante, pues gracias a ellos se pueden masticar los alimentos para poder comerlos y así recibir los nutrientes de la comida, pero es importante señalar que estos deben cuidarse diariamente para evitar enfermedades que pueden terminar en la pérdida de algún diente.
Por ejemplo, la Clínica Dental Odontologic reveló las seis razones por las que se caen los dientes:
1. Patologías graves. Enfermedades como la diabetes, el cáncer u otras enfermedades pueden ocasionar que se caigan los dientes.
2. Periodontitis. También llamada enfermedad de las encías, es una grave infección de las encías que daña el tejido blando y que, sin tratamiento, puede destruir el hueso que sostiene los dientes. La periodontitis puede llevar a que los dientes se aflojen o que se pierdan.
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3. Traumatismo. “Un golpe fuerte en la boca puede provocar la perdida e un diente”, según explicó la Clínica.
4. Usar los dientes como herramienta. Abrir envolturas, sujetar las llaves, soltar nudos de bolsas, partir nueces, morder las uñas, morder lápices, entre otros, pueden causar que los dientes se caigan.
5. Bruxismo. Es un trastorno en el que se rechinan, crujen o aprietan los dientes. Es posible que no se requiera tratamiento para el bruxismo leve. Sin embargo, en algunas personas, el bruxismo puede ser frecuente y lo suficientemente intenso como para producir trastornos de la mandíbula, dolores de cabeza, daños en los dientes y otros problemas.
6. Caries. Es el daño en la superficie o esmalte de un diente y ocurre cuando bacterias en la boca fabrican ácido que ataca el esmalte. Además, si no son tratadas, pueden causar dolor, infección e incluso pérdida de dientes.
¿Cómo proteger la salud bucal?
- Cepillarse los dientes al menos dos veces al día durante dos minutos cada vez.
- Usar un cepillo de cerdas suaves y una pasta dental con fluoruro.
- Usar hilo dental todos los días.
- Usar un enjuague bucal para eliminar las partículas de comida que quedan después de cepillarse los dientes y usar hilo dental.
- Hacer gárgaras con soluciones de enjuague o masticar una tableta especial en la boca puede ayudar a identificar las áreas de acumulación de sarro.
- Seguir una dieta saludable y limitar los alimentos y las bebidas con azúcar. Lo recomendado es evitar los refrigerios entre comidas, sobre todo comidas pegajosas y azucaradas así como alimentos ricos en carbohidratos como papas fritas. Además, si se comen refrigerios en la noche, hay que cepillarse después y no se debe comer ni beber nada (se puede tomar agua) después de cepillarse los dientes para acostarse.
- Reemplazar el cepillo de dientes cada tres a cuatro meses o antes si las cerdas están abiertas o gastadas.
- Programar revisiones médicas y limpiezas dentales regulares, al menos cada seis meses para que este realice una limpieza completa de los dientes y un examen oral. Algunas personas que tienen enfermedad periodontal pueden requerir limpiezas más frecuentes.
- Evitar el consumo de tabaco.
Hay que señalar que si existe alguna molestia en los dientes, Mayo Clinic recomienda asistir al dentista para que este realice una revisión y con esto se evite tener dificultades más serias, entre ellas padecer de endocarditis, una infección del revestimiento interno de las cámaras o válvulas cardíacas (endocardio) que por lo general ocurre cuando las bacterias u otros gérmenes de otra parte del cuerpo, como la boca, se propagan a través del torrente sanguíneo y se adhieren a ciertas zonas del corazón.
Además, el cuidado de la salud bucal es importante en las personas que presentan enfermedades generales como hipertensión, diabetes, cáncer, VIH, enfermedades respiratorias, entre otras, para reducir el riesgo de que además presenten sobreinfecciones de origen en la boca.