SALUD
Estas son las mejores horas para comer, según la ciencia
Habituarse a un horario específico para comer forma parte de un estilo de vida saludable.
De manera frecuente se escucha decir que llevar una alimentación saludable es clave para mantener unas condiciones de salud adecuadas. Por esta razón, la preocupación se centra en cuánto y qué se come, pero no tanto en qué horas hacerlo.
Ssegún los expertos, el horario de las comidas también juega un papel clave para mantenerse saludable. Por ejemplo, la ciencia ha demostrado que establecer la mejor hora del día para comer puede ser una estrategia para combatir la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas y la obesidad, precisa el portal Mejor con Salud.
Habituarse a un horario para ingerir las comidas más importantes del día forma parte de un estilo de vida saludable, pues el cuerpo tiene un sistema de cronómetros biológicos en todas las células que controlan los horarios para dormir, liberar hormonas, para la función cardíaca e incluso, para comer.
Las horas en las que se ingieren los alimentos es clave porque así el cuerpo y el metabolismo pueden realizar el proceso para digerir y transformar los alimentos en nutrientes esenciales para el normal funcionamiento del organismo.
Según un artículo publicado por el medio digital Business Insider, cuando se trata del desayuno, lo recomendable es retrasarlo una hora después de que la persona se levanta, según indica Constance Brown-Riggs, vocera de la academia estadounidense de nutricionistas y dietistas.
En torno a este alimento, un estudio realizado por la Universidad de Telaviv, indica que antes de las 9:30 a. m. el cuerpo metaboliza mejor la primera comida del día, por ello si la persona se levanta tarde lo ideal es no esperar mucho para desayunar.
De igual forma, lo recomendable es que este primer alimento no se ingiera después de las 10:00 a. m. pues, según los expertos, por ejemplo, la insulina que regula el azúcar en la sangre es mayor por la mañana. Por lo tanto, cuando una persona come temprano establece una carga de azúcar y energía para el resto del día.
Almuerzo
Por otro lado, un estudio realizado por las universidades de Harvard y Murcia, publicado en la revista International Journal of Obesity, indica que comer a deshoras tiene incidencia en el reloj biológico y favorece problemas de salud como la obesidad.
Además, según Mejor con Salud, la diferencia de horas entre el almuerzo y el desayuno debe oscilar entre cuatro y cinco. En caso de no poder hacerlo, la recomendación es incluir un refrigerio rico en proteínas y carbohidratos. Esto evita que la persona tenga hambre en exceso al momento del almuerzo, el cual, según los estudios, debe ser más liviano que el desayuno, pues el metabolismo en ese momento no está en su punto máximo como en horas de la mañana.
Cena
En cuanto a la cena, lo más recomendable es que sea entre las 18:00 y las 18:30 horas. Sin embargo, esto depende del momento en que la persona se va a dormir. Lo ideal es que este último alimento del día se consuma tres horas antes de meterse en la cama, con el fin de facilitar el proceso digestivo.
Una publicación realizada en la revista International Journal of Obesity precisa que la capacidad del cuerpo para regular el azúcar en la sangre se vuelve más lenta en el horario nocturno y esto explica por qué las personas que trabajan en la noche corren un mayor riesgo de subir de peso o de sufrir enfermedades como diabetes.
Los expertos indican que entre los mejores alimentos para la cena se encuentran el pescado, las frutas, los frutos secos y la carne de pavo, los cuales contienen altos niveles de un aminoácido llamado triptófano, que ayuda a secretar serotonina y melatonina, que son relajantes e inductores del sueño y convierten los ácidos grasos en energía.