VIDA MODERNA
Estas son las razones para preocuparse por los mareos repentinos
De acuerdo con el portal de la Clínica Mayo, los mareos son una de las causas más frecuentes por la que los adultos visitan al médico.
El mareo es un término utilizado para hacer mención al vértigo que provoca sensación de desmayo, según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus.
Muchas pueden ser las causas de este síntoma, en las que se encuentra la presión arterial baja o la deshidratación, que tiene otras variantes como la fiebre o la diarrea, por ejemplo.
De acuerdo con el portal de la Clínica Mayo, los mareos son una de las causas más frecuentes por la que los adultos visitan al médico. Esta organización estadounidense señala que las personas deben preocuparse y buscar atención médica si tienen mareos o vértigos que sean recurrentes, súbitos, prolongados y sin explicación, con cualquiera de los siguientes síntomas:
-Dolor de cabeza súbito e intenso
-Dolor en el pecho
-Dificultad para respirar
-Entumecimiento o parálisis de los brazos o las piernas
-Desmayo
-Visión doble
-Latidos del corazón rápidos o irregulares
-Confusión o arrastrar las palabras
.Dar traspiés o tener dificultad para caminar
-Vómitos continuos
-Convulsiones
-Cambio súbito en la audición
-Entumecimiento o debilidad en la cara
Entre las causas de los mareos, de acuerdo con la Clínica Mayo, también se encuentran trastornos en el oído interno, mareos por movimiento y efectos de los medicamentos. Adicionalmente, en ocasiones, pueden ser causados por “un trastorno de salud de base, como circulación deficiente, una infección o una lesión”.
Entre los problemas de circulación que pueden causar mareos se encuentran descensos de la presión arterial. Este trastorno también se denomina hipotensión ortostática. De igual manera, otro causante es la mala circulación sanguínea.
Otras causas mencionadas son las afecciones neurológicas como la enfermedad de Parkinson y la esclerosis múltiple, Adicionalmente, se encuentran los trastornos de ansiedad. “Ciertos trastornos de ansiedad podrían causar aturdimiento o sensación de atontamiento, a los que a menudo se les llama mareos. Estos comprenden ataques de pánico y temor a salir de casa o estar en espacios grandes a la intemperie (agorafobia)”, señala la Clínica Mayo.
También se mencionan entre las causas de los mareos las concentraciones de hierro (anemia) y un nivel bajo de glucosa en la sangre (hipoglucemia).
Mareos al levantarse: por qué pasan
La hipotensión ortostática es una causante de mareo que se experimenta cuando se levanta una persona muy rápido, ya sea de la cama o luego de estar sentado. Suele ocurrir en la mayoría de los casos en adultos mayores.
Para definir la hipotensión se debe aclarar que la hipertensión (presión arterial alta) es aquella afección en al cual la sangre ejerce fuerza en las paredes de las arterias, causando problemas cardíacos. Por lo tanto, la presión arterial baja (hipotensión) es lo contrario.
Sin embargo, la hipotensión ortostática “es una forma de presión arterial baja que se produce al ponerte de pie después de estar sentado o acostado”, señala la Clínica Mayo.
“La hipotensión ortostática puede ser leve. Los episodios pueden ser breves. Sin embargo, la hipotensión ortostática persistente puede ser señal de problemas más graves”, puntualiza la entidad de ciencia y salud.
Una persona con esta afección puede presentar síntomas tales como: visión borrosa, mareo, debilidad y/o desorientación, todo esto porque se prolonga el tiempo de reposo ya sea en una silla o en una cama.
Cuidados caseros para el mareo
En caso de que los mareos se presenten cuando la persona se pone de pie, MedlinePlus expone los siguientes consejos para prevenir dicha sensación:
- Evitar cambios repentinos de postura.
- Levantarse desde una posición de acostado lentamente y quedarse sentado por unos momentos antes de pararse.
- Al pararse, asegurase de tener algo de donde sostenerse.
En caso de que aparezcan síntomas de vértigo, las siguientes acciones pueden ayudar a estabilizarlo:
- Permanecer quieto y descansar cuando se presenten los síntomas.
- Evitar cambios súbitos en movimientos o posición.
- Aumentar lentamente la actividad.
- Ayudarse con un bastón u otro elemento para recuperar el equilibrio.
- Evitar las luces brillantes, la televisión y leer durante un ataque de vértigo, debido a que esto puede empeorar los síntomas.