Vida Moderna
Estos son los alimentos imprescindibles para un desayuno después cumplir los 60 años
Los alimentos que se consumen son parte fundamental de una vida saludable.
Con el paso de los años, los órganos del cuerpo dejan de funcionar de la misma manera que en la juventud. Este proceso de deterioro progresivo se acrecienta entre los 60 y 70 años de edad, según aseguró al periódico argentino Clarín Diane McKay, investigadora de nutrición del Tufts University en Boston.
Por esta razón, a lo largo de la vida, la ciencia ha demostrado que el cuerpo requiere de altas cantidades de nutrientes, pero cuando llega la etapa de madurez unas toman mayor importancia que otras para que el organismo se encuentre en las mejores condiciones para afrontar la etapa de la vejez.
Por este motivo, una buena nutrición siempre es importante para tener energía, controlar el peso y vivir una vejez saludable. Sin embargo, el paso del tiempo siempre traerá deterioro en la salud, por lo que los alimentos cada vez se tienen que consumir con mayor atención.
Algunas personas necesitas menos calorías, pero siempre necesitan tener suficientes nutrientes. Otros adultos mayores necesitan proteínas para poder mantenerse en buen estado de salud y sin dificultades.
Por este motivo, los alimentos que se deben consumir en los desayunos después de los 60 años deben elegirse con mayor atención, buscando obtener mayores nutrientes y que no tengan calorías de más. Para esto, es fundamental consumir en la primera comida del día frutas y vegetales, preferiblemente de diferentes tipos de colores vivos.
También es recomendable consumir en los desayunos granos integrales como avenas, arroz y pan (siempre integrales). Además, empezar a incluir la leche descremada y el queso bajo en calorías. También es importante tener en cuenta leche de arroz o de soya fortificada con calcio y vitamina D.
Teniendo un desayuno así de saludable, se recomienda que el almuerzo vaya por la misma línea. Es decir, consumir pescados, mariscos, carnes, huevos, frijoles, nueces y semillas. Porque si bien tener más de 60 años no significa que ya se es adulto mayor, sí es un punto clave de la vida para comenzar a cuidar mejor la alimentación y así poder lograr una vejez con mejor salud.
Tres vitaminas para las mujeres, que deben consumir después de los 60 años
Vitamina B12
Esta vitamina es una de esas recomendaciones para las mujeres dentro de este rango de edad. Según estudios realizados por la Academia Nacional de Medicina de Estados Unidos, la falta de esta vitamina podría aumentar el riesgo de padecer problemas relacionados con la demencia.
El portal experto en temas de salud, Mayo Clinic, expone los alimentos ricos en vitamina B12 que podrían incluirse en la dieta diaria.
“Las fuentes alimentarias de vitamina B-12 incluyen la carne de aves, de vaca y de pescado, y los lácteos. La vitamina B-12 también se agrega a determinados alimentos, como los cereales fortificados para el desayuno, y está disponible como suplemento oral”, explica.
Vitamina D
Otras de las recomendaciones en cuanto a vitaminas para mujeres mayores de 60 es la vitamina D; esta es clave en los procesos de reducción de los dolores crónicos. También trae beneficios para el buen funcionamiento del sistema cardiovascular.
Una de las formas de adquirir esta vitamina es por medio de la dieta, en alimentos como huevo, hígado, queso y atún. El portal de la Biblioteca de Medicina de EE. UU., Medline Plus, explica otros métodos para adquirir esta importante vitamina.
“Usted puede obtener vitamina D de tres maneras: a través de su piel, su dieta y suplementos. Su cuerpo produce vitamina D naturalmente después de exponerse a la luz del sol. Pero demasiada exposición al sol puede ocasionar envejecimiento de la piel y cáncer de piel, por lo que muchas personas buscan obtener su vitamina D de otras fuentes”, afirma.
Omega 3
A pesar de no ser directamente una vitamina, sí debe ser incluido en este listado. Este ácido graso es poliinsaturado, lo que lo hace un componente esencial para mantener y restaurar las funciones vitales del cuerpo.
Este trae consigo beneficios para el cerebro, lo que se traduce en un mejor estado celular y equilibrio en aspectos como el ánimo y memoria.
El sitio experto en alimentación Formulabs expone las mejores fuentes de omega-3. “La principal fuente natural de omega-3 es el pescado azul. Cuando hablamos de pescado azul incluimos aquí las sardinas, el atún, la trucha, el salmón, las anchoas, la palometa, entre otros. Pero también se puede encontrar en gran cantidad en los mariscos”, añaden.