Estos son los beneficios de consumir manzana para la salud

La manzana es una de las frutas más completas y saludables que se conocen por su contenido en hidratos de carbono, fibra, vitaminas y potasio, siendo muy recomendable para todas las edades.

La manzana es el fruto del ‘Pyrus malus L.’, un árbol de la familia de las rosáceas, a la que también pertenecen otras frutas como el melocotón, el albaricoque, la ciruela y la cereza, entre otras. Aunque se desconoce el origen exacto de la manzana, se cree que procede del cruce de varias especies de manzanos silvestres europeos y asiáticos. Lo que sí es seguro es que el hombre, desde la antigüedad, aprendió a cultivar el manzano y, actualmente, es uno de los árboles frutales más cultivados en todo el mundo.

Llegó a Sudamérica en el siglo XVI de la mano de los conquistadores españoles, donde pronto se extendió su cultivo y, un siglo después, desde Iberoamérica, el manzano alcanzó América del Norte y posteriormente África septentrional y Australia.

Nutrientes de la manzana

Desde un punto de vista nutricionista, la manzana es una fruta muy completa. A su bajo aporte calórico (una manzana media contiene unas 80 kcal) se añade su riqueza en determinados nutrientes:

• Agua: el 85 % de su composición es agua, por lo que resulta una fruta muy refrescante e hidratante.
• Hidratos de carbono: contiene fructosa y, en menor proporción, glucosa y sacarosa, que son fácilmente absorbidos por el organismo.
• Proteínas y grasa: en cantidades pequeñas, poco importantes respecto a su contenido en otros nutrientes.
• Vitaminas: contiene pequeñas cantidades de vitamina E o tocoferol y vitamina C, de acción antioxidante. El contenido en vitamina C varía según la variedad, siendo las manzanas reinetas las que más vitamina C contienen (11 mg), seguidas de la Granny Smith (7,3 mg), la Golden (5 mg) y las variedades rojas (3,6 mg). Además, también están presentes las vitaminas del grupo B que favorecen las funciones nerviosas.

• Minerales: destaca la presencia de potasio, necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular, y que, a la vez, favorece la función renal. También contienen pequeñas cantidades de zinc, manganeso, azufre, flúor, yodo, boro o selenio, que desempeñan importantes funciones en los procesos que realizan las células.
• Fibra: la manzana es rica en fibra. Se calcula que una manzana aporta unos 3 gramos de fibra. Esta fibra no solo está en su cáscara, sino también en su pulpa, y se compone fundamentalmente de celulosa y pectina, que ejercen una interesante acción sobre la regulación del tránsito intestinal. Estas fibras resultan eficaces para estimular un tránsito intestinal lento y para ayudar a combatir la diarrea.
• Rica en flavonoides: esta fruta contiene flavonoides como la quercetina, de propiedades antioxidantes, y en taninos, con capacidad astringente y antiinflamatoria, así como en ácidos orgánicos como el ácido málico y el tartárico.

Beneficios de la manzana para la salud

Además de su sabor y las muchas variedades que se pueden encontrar, las manzanas ofrecen una larga lista de beneficios para la salud gracias a que son antioxidantes y a que tienen sustancias fitoquímicas, entre las que destaca la quercetina, que ayuda con problemas cardiovasculares e inflamatorios entre muchos otros.

Comer esta fruta es beneficioso para la salud, siempre y cuando se consuman en combinación con una dieta saludable y con un estilo de vida sano.

Fortalece el sistema inmune: las manzanas mejoran el sistema inmunitario. Esto se debe a las grandes cantidades de carotenoides y flavonoides que tienen una acción antioxidante y antiinflamatoria, por lo que mejoran las células del sistema inmune y las ayudan a combatir contra infecciones, enfermedades, etc.

Protege contra enfermedades cardiovasculares: la manzana es rica en pectina, un tipo de fibra soluble, que actúa disminuyendo la absorción de grasas que provienen de la alimentación, como el colesterol y los triglicéridos, que son responsables por el desarrollo de enfermedades cardiovasculares como el infarto de miocardio, aterosclerosis y derrame cerebral.

Mejora la función cerebral: uno de los flavonoides que contiene la manzana, como se ha mencionado antes, es la quercetina, la cual es a la vez antioxidante y antiinflamatoria. Esto tiene muchos beneficios diferentes en el organismo, entre los cuales se encuentra ayudar a proteger las células de todo el sistema nervioso central, que luchan contra los radicales libres y así evitan la inflamación del cerebro. Como consecuencia, es posible prevenir el alzhéimer o, mejor dicho, retrasarlo, y también mejorar la memoria.

Prevenir y controlar la diabetes: los polifenoles presentes en la manzana tienen propiedades antioxidantes que protegen las células beta del páncreas del daño oxidativo, las cuales se encargan de la producción de la insulina, una hormona que mantiene el equilibrio de la glucosa en sangre, siendo importante para prevenir y tratar la diabetes.

Adicional a esto, esta fruta es rica en fibras que ayudan a que el azúcar de los alimentos se absorba más lentamente, contribuyendo en el control de la glucemia.

Ayuda a controlar problemas intestinales y aliviar el dolor de estómago: este es otro de los beneficios de la manzana por el que es muy conocida. De hecho, es común que cuando una persona o un niño tienen dolor de estómago o molestias fuertes, se les dé manzana sin temor a que este alimento dañe el estómago.

También, las catequinas y los carotenoides de la manzana ayudan a combatir la Helicobacter pylori, que es la causante de gastritis, úlceras y más; y gracias a la celulosa, a las ligninas y otras fibras, que ayudan a la absorción del agua en el intestino y que, por tanto, evita el tránsito lento, ayuda a una apropiada evacuación de heces.

Combate el asma: este es uno de los beneficios de comer manzana menos conocidos. La quercetina de la manzana, que es antioxidante, evita el llamado daño oxidativo de los órganos del aparato respiratorio y, además, impide su inflamación. Los expertos sugieren que consumir esta fruta con frecuencia ayuda a evitar y prevenir enfermedades como el asma, la bronquitis y la rinitis.

Evita las caries: otro beneficio muy popular de las manzanas es que ayudan a evitar las caries. Gracias a su ácido málico, aumenta la producción de saliva en la boca y de ese modo reduce la proliferación de bacterias, que son las principales responsables de que en los dientes se forme una placa que con el paso del tiempo y sin el correcto cuidado se transforma en una caries dental.

Puede prevenir algunos tipos de cáncer: para que sea efectivo, debe consumirse la manzana frecuentemente. Los radicales libres son uno de los principales causantes del cáncer. Estos están en numerosos alimentos, sobre todo en los procesados y en los ultraprocesados. Para combatirlos, lo mejor es reducir la oxidación y la inflamación que provocan a las células. Y para ello, nada mejor que los polifenoles de la manzana con sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias para prevenir los diferentes tipos de cáncer.

Es antienvejecimiento: la manzana se considera antiedad, ya que gracias a los antioxidantes combate los radicales libres que afectan la piel y así reduce la flacidez, las arrugas y aporta flexibilidad y brillo. Además, combate los alimentos de alto índice glucémico como el pan blanco o los pasteles, que son uno de los principales causantes del envejecimiento prematuro.